Por Enrique Huerta
CANCÚN, MX.- En este río revuelto que es el divorcio en Quintana Roo entre el Partido Encuentro Social (PES) y el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), el más beneficiado por la confusión que genera esta situación, es Gregorio Sánchez.
“Greg”, quien es dirigente estatal del PES y candidato a diputado plurinominal de la coalición “Juntos Haremos Historia” no sólo aprovechará el arrastre del candidato presidencial de esta alianza, Andrés Manuel López Obrador, para obtener los votos para llegar a San Lázaro, sino que también hará campaña por el PES, al acompañar en sus recorridos a sus candidatos a las 11 presidencias municipales, como lo anunció en la presentación de la candidatura a la presidencia de Benito Juárez de su esposa, Niurka Sáliva.
Otro factor que beneficiaría a Encuentro Social, es que sus candidatos a presidentes municipales podrían obtener más votos, por dicha confusión generada porque la elección federal va junto con Morena y PES, pero en la local no.
En otras palabras, López Obrador es candidato de dos fuerzas, aliadas en la esfera federal, pero rivales en lo local. Esto podría restar votos a los candidatos de Morena.
Esta situación fue detectada por Morena y ahora, ha solicitado impugnaciones en los tribunales electorales; la última fue contra “Greg”, a quien le piden que solicite autorización para utilizar la imagen de López Obrador, luego de los promocionales en los autobuses, donde se observan las fotos de ambos y los logos de Morena, PES y PT.
Pero ya hay un antecedente en los juzgados que no le viene bien a Morena: que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación haya fallado contra las casi 20 impugnaciones que buscaban evitar la salida del PES de la coalición “Juntos Haremos Historia”, con lo que avaló el divorcio entre ambas partes para las elecciones locales.
“Con este fallo que se acaba de dar estamos de fiesta, porque refrendan lo que el Teqroo ya había dictaminado en contra de un Ieqroo, carente de criterio propio”, escribió en su cuenta de Twitter el secretario general del PES en Quintana Roo, Rubén Darío.
E, incluso, volvió a la carga en contra de la dirigencia estatal de Morena: al calificar al delegado actual de Morena en el estado: Rafael Marín; al candidato al Senado, José Luis Pech; al representante de Morena ante el Ieqroo, Marciano Peñaloza, y a la candidata a la presidencia municipal de Solidaridad, la experredista Laura Beristain, como “unos tramposos y que querían robarnos en despoblado”.
Seguro de sí, luego de burlarse de esas impugnaciones durante la presentación de los 11 candidatos a presidentes municipales –“Se dicen grandotes los de Morena; qué grandotes y qué miedosos. Hay 400 y tantas quejas que quieren que regresemos, parecen la ‘Magdalena’ llorando: ‘¡Por favor, regresen’! Encuentro Social, regresen’. Para qué nos dejaron ir, para que no cumplen sus acuerdos. La verdad es vergonzoso lo que está haciendo Morena”–, Gregorio Sánchez reiteró su objetivo: llegar a la gubernatura de Quintana Roo. (Noticaribe)