Por Enrique Huerta
CANCÚN, MX.- En la jornada electoral de este domingo, el PRI con sus aliados cayó en Quintana Roo por segunda ocasión en dos años y apenas logró rescatar cuatro ayuntamientos.
Hasta el 30 de junio, el PRI y sus aliados en Quintana Roo tenían las senadurías y las tres diputaciones de mayoría, así como las presidencias municipales de ocho municipios, incluido el más importante, Benito Juárez.
Sin embargo, el 2 de julio, el tricolor amaneció en Quintana Roo severamente disminuido con una segunda derrota consecutiva, tras la gloria sin límites del ‘felixismo-borgismo’.
Hace apenas tres años, en la cúspide del quinquenio de Roberto Borge, rebosaba el carro completo de alianza PRI-PVEM-Panal con los dos senadores de mayoría relativa, los tres diputados federales de mayoría relativa, además del entonces 10 presidencias municipales y 19 de 25 diputados locales.
En los comicios locales de 2016, inició la debacle del PRI en Quintana Roo, al perder la gubernatura y si bien ganó ocho presidencias municipales, y perdió nada más que Solidaridad, Cozumel y Othón P. Blanco, aunque ganó 13 distritos en la elección de diputados locales.
Y, los resultados de los comicios del 1 de julio confirman la debacle del PRI en este estado, pues sólo logró ganar en cuatro municipios, los cuales tres cuentan con menos de 50 mil habitantes, susceptibles a la compra y coacción del voto y perdió sus dos senadurías y todas las diputaciones federales de mayoría, que para este proceso electoral pasado de tres a cuatro.
Curiosamente, Juan Carrillo, sólo con el logotipo del Revolucionario Institucional PRI, así como Laura Fernández, y Alexander Zetina, con la alianza PRI-PVEM-Panal lograron la reelección en Isla Mujeres, Puerto Morelos y Bacalar.
Además, el PRI recuperó Cozumel con Pedro Joaquín Delbouis, hijo del secretario de Energía y ex gobernador del estado, Pedro Joaquín Coldwell, aunque en la campaña trató de deslindarse de este partido.
En contraste, el PRI y sus aliados perdieron los municipios José María Morelos, Felipe Carrillo Puerto y Tulum, a manos de los candidatos de la alianza PAN-PRD-MC, Sofía Alcocer, José Esquivel y Víctor Mas.
Al mismo tiempo, la alianza PRI-PVEM-Panal perdió las presidencias municipales de Lázaro Cárdenas, contra el abanderado del PT, Nivardo Mena, y, de Benito Juárez, a manos de la candidata de Morena-PT, ‘Mara’ Lezama, y en donde, por cierto, el tricolor quedaría un regidor, el cual será del Partido Verde.
Esta debacle priista también se vio en la elección a los puestos de cargo popular a nivel federal. Hace unos días, el tricolor tenía en su poder las dos senadurías de mayoría, que estaban en manos del ex gobernador Félix González Canto y el militante del PVEM, Jorge Aréchiga, suplente de Jorge Emilio González, alias ‘El Niño Verde’. Ahora, esas posiciones fueron ganadas por los candidatos de Morena.
En la disputa por la Cámara de Diputados pasó la misma historia: el PRI no supo mantener los tres escaños en San Lázaro. Arlet Mólgora, Mario Machuca y José Luis Toledo Medina –quien en el contexto de la campaña renunció a su militancia–, serán los últimos legisladores priistas en San Lázaro por los siguientes tres años.
Y ni hablar de cómo le fue al PRI en Quintana Roo en la elección presidencial en Quintana Roo, en donde por tercera vez consecutiva, Andrés Manuel López Obrador obtuvo más votos (2006, 2012 y 2018).
Es decir, del ‘carro completo’ ganado en 2013, el PRI pasó a ser tercera fuerza en el estado y a ser borrado en la representación de Quintana Roo en el Congreso de la Unión. (Noticaribe)