Con único gol por parte de Samuel Umtiti, Francia consiguió ser el primer invitado a la Gran Final de Rusia 2018, al derrotar por marcador de 1-0 a Bélgica, correspondiente a la primera semifinal del certamen mundialista número 21 en la historia.
Bélgica y Francia dieron a conocer en los primeros 45 minutos el poderío que ambas escuadras tenían, en busca de uno de los dos únicos pases al partido más importante de la sede mundialista, pues ambas escuadras dieron golpes de autoridad dentro del tapete verde.
A pesar de que en la primera página no llegó el invitado especial (gol), las dos selecciones tocaron la puesta rival en ocasiones claras para haber hecho que el marcador en el Estadio de San Petersburgo se moviera un par de ocasiones, por mínimo.
Las actuaciones de ambos porteros: Thibaut Courtois (BEL) y Hugo Lloris (FRA) fueron fundamentales para que la brillosa se quedara con el par de roscas en la primer página del duelo, ya que sin su actuación, ambos equipos ya hubieran guardado, aunque sea, una pelota.
Para la segunda parte, el cuadro galo adelantó filas y comenzó a tener más espacios en el ataque. Las oportunidades hicieron que al minuto 50 los franceses tuvieran la recompensa.
En tiro de esquina, Samuel Umtiti tuvo su premio al buscar el balón por el aire y, de cabeza, firmó el primer tanto del partido, haciendo que su oponente hiciera un cambio obligatorio para recuperar la posesión del balón y meter a Dires Mertes por Mousa Dembele al ’60.
La anotación hizo que poco a poco la desesperación comenzara a llegar a cada uno de los 11 soldados belgas que buscaban igualar el marcador, pero en menos de 10 minutos Kevin De Bruyne y Toby Alderweireld fueron amonestados por cometer falta.
Al final, la única diana hecha en el partido fue la que le dio el pase a la gran fiesta de la Copa del Mundo a Francia y regresará a la final de la justa mundialista después de 12 años sin conseguir el boleto privilegiado, a pesar de que en Alemania 2006 no se consagraron, al perder en penales frente a Italia. (AGENCIAS)
