CAMPECHE, MX.- El suicidio de un adolescente de catorce años, estudiante de secundaria, conmocionó no únicamente a la familia de la víctima sino a vecinos de la comunidad que no se explican cómo el menor pudo tomar tan fatal decisión. Los hechos ocurrieron ayer en un domicilio ubicado en el fraccionamiento Quinta Hermosa de la ciudad de Campeche y con dicho deceso suman 47 los registros de suicidios en el estado.
La madre del menor relató que salió a la tienda y el joven se quedó en casa acompañando a su hermana menor; fue ese el momento que el jovencito aprovechó para colgarse —no se ofrecieron mayores datos sobre la mecánica del suicidio—; la niña fue la primera en darse cuenta de los hechos y corrió a la calle para solicitar auxilio.
Un vecino de la familia llamó a los servicios de emergencia y acudió a descolgar al joven que lamentablemente ya había perdido la vida, según comprobaron a su llegada los paramédicos de la Cruz Roja.
Personal del Ministerio Público inició una carpeta de investigación tras el incidente y el cuerpo del infortunado adolescente fue canalizado al servicio forense para practicarle la necropsia de ley.
El menor no dejó mensaje póstumo, pero transcendió que había recibido un regaño o sanción por romper un teléfono celular de su propiedad. (Con información de: elsur.mx)