Por Julio César Solís (Fotos: Gonzalo Zapata)

CANCÚN, MX.- Como un pequeño pueblo fantasma, es como luce la sede del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Benito Juárez. Cerrada a la militancia y público en general, en completo abandono y bajo un panorama desolador.

Desde agosto se puso seguro al sitio y se despidió a personal.

El busto de Luis Donaldo Colosio Murrieta ve pasar los días y las noches, tras la estrepitosa derrota del tricolor el pasado primero de julio; catalogada por varios como la peor en sus 89 años de historia.

El desfile de lideresas o simpatizantes por el edificio situado en la súper manzana 1 de esta ciudad, ha quedado atrás, y hoy, el inmueble parece uno más de los elefantes blancos con los que cuenta este destino vacacional.

Ediciones de periódicos locales a las afueras, y ‘souvenirs’ de la campaña de José Antonio Meade así como un par de sillas y un escritorio, son de los pocos artículos que se observan al interior del PRI en este municipio, las cuales acompañan las tres placas conmemorativas de renovación que ha tenido las instalaciones.

Pero algunos de sus afiliados exigen que las dirigencias estatal y municipal paguen las cuentas, y no únicamente por el servicio de agua potable y alcantarillado, que por un adeudo de tres meses asciende a 3 mil 535 pesos, sino por el desastroso proceso electoral en el que quedaron borrados del mapa, a tal grado que, por primera vez en los 48 años de Cancún, el PRI no tendrá un regidor emanado de sus filas.

Entrevistada en el lugar junto con otras priistas, Niza Puerto Paredes, lamentó que la dirigencia en Benito Juárez, que encabeza el croquista René Sansores Barea, haya dejado abandonadas las oficinas, empero, responsabilizó también de la situación al propio priismo, que ha permitido la imposición de distintos personajes en cargos de elección popular y en los órganos directivos internos.

“La situación que tiene el PRI Benito Juárez es el total abandono, ahora están cerradas las oficinas cuando deberían estar abiertas. Mucha culpa la tiene la militancia y lo hemos estado hablando, no podemos permitir que nos sigan poniendo gente que no queremos, gente que viene nada más y que ya está en sus puestos, y se brinca a otros partidos”, puntualizó.

Por ello, adelantó que serán tomadas medidas extremas ante el desinterés por parte de las dirigencias municipal y estatal por reencaminar el rumbo del priismo en Quintana Roo.

Calificó como un insulto que se aprovechen del trabajo de la base priista y urgió a que se haga cargo del partido alguien que ‘tenga pelotas bien puestas’.

“Tomamos la decisión de tomar el partido, tomarlo y reconstruirlo que es lo que necesita hoy el PRI; el pasado ya es pasado, pero ya no les vamos a seguir permitiendo que sigan usando a la gente que verdaderamente es la que hace el trabajo”, señaló.

Y sostuvo “me parece que es un insulto y me parece que ya es hora de que de verdad alguien que tenga pelotas bien puestas, venga y haga lo que se tiene que hacer con un partido: reconstruirlo y tomarlo, porque para eso es el PRI”.

Por su lado, Maricruz Vargas Aceves, externó su preocupación por que el PRI haya perdido su esencia que es la democracia y la justicia social, lo que lo llevó a la devastación municipal y nacional.

“Tenemos que regresar a las raíces priistas que es la gestoría, que es la ayuda social”, aseguró.

Pidió que el edificio del PRI Benito Juárez reabra sus puertas y dijo que la militancia está harta de servir para beneficio de unos cuantos.

Además, aseveró que Remberto Estrada y hasta la actual diputada federal, Ana Patricia Peralta de la Peña, le deben al priismo ocupar los puestos que actualmente ostentan.

“Queremos que este edificio esté abierto, queremos que este edificio esté en función para lo que está planeado nuestro partido. Estamos harta la militancia de que se nos siga usando para beneficio de dos”, indicó.

Y enfatizó, “hasta Remberto nos debe que esté en el municipio; hasta Ana Paty que ya no está con nosotros y que ya se fue nos debe donde llegó, porque si bien llegaron en una alianza, nosotros siempre somos las de abajo, las que luchamos, las que llevamos al poder a todos y después se lavan las manos y nos dejan abandonadas.

También, en días pasados, el líder de trabajadores de la construcción, José Juan Chilón Colorado, instaló una mesa para renovar al PRI. (Noticaribe)

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