YUCATÁN, MX.- Integrantes del colectivo Indignación calificaron como una amenaza el señalamiento del delegado de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en Yucatán, José Lafontaine Hamui, en torno a que denunciaría penalmente a los habitantes de Homún que retuvieron a inspectores de dicha dependencia durante un operativo que ‘coincidió’ con la protesta en contra de la llamada mega granja de cerdos.
Según Lafontaine Hamui ―a quien señalan de ser omiso en su verdadera función que es evitar daños al medio ambiente― los pobladores privaron de su libertad a los inspectores por al menos tres horas y deberán responder por la comisión de los delitos que resulten. El operativo que sería realizado en los cenotes se programó el mismo día en que los inconformes convocaron a manifestarse contra los empresarios y funcionarios de gobierno que han tolerado las irregularidades.
Miembros del colectivo Indignación consideraron que, con las declaraciones del delegado de la Profepa, lo que se busca es criminalizar la protesta pacífica de los pobladores de la comunidad maya; “es una amenaza contra los pueblos, de criminalización de la defensa de los cenotes. Es gravísimo”, dijo Marta Capetillo Pasos.
Además, indicó que la clausura de los cenotes fue dirigida precisamente de las personas que están más activas en la defensa de los mismos y contra la granja, “fue una represalia y una provocación”.
Aclaró que en ningún momento se privó de la libertad a los supervisores, sino que por las condiciones de la protesta los accesos fueron cerrados lo que ocasionó dificultades para transitar por la zona, pero que en ningún momento se cometió delito alguno; aseguró que las declaraciones de Lafontaine Hamui no atemorizarán a los pobladores de Homún, que continuarán con la defensa de sus riquezas naturales y culturales. (Con información de: Diario de Yucatán)
