TABASCO, MX.- El desastre petrolero que inició a fines del 2014 y que no estaba en el horizonte inmediato, vino a alterar las previsiones del gobierno estatal, generando una crisis en cadena que afectaron al gasto público federalizado e incluso a los ingresos propios estatales, precisó el gobernador Arturo Núñez Jiménez, al dirigir su mensaje a los tabasqueños en su Sexto Informe de Gobierno, publicó Tabasco Hoy.
El mandatario estatal recordó que en 2013, conociendo las finanzas públicas estatales, estableció tres etapas para su gestión gubernamental, la primera de enfrentamiento de la crisis heredada, la segunda de consolidación de avances y la tercera de crecimiento económico y desarrollo social, la debacle petrolera generó una severa crisis alterando los planes de gobierno.
Y es que a la caída de los precios del barril de crudo en los mercados internacionales, le sucedió la caída de la producción nacional, por la gran dependencia de los ingresos petroleros en las finanzas federales, la recaudación se cayó de representar al inicio del gobierno más del 40% del total de los ingresos públicos a sólo el 17% durante el 2018.
Señaló que los recursos públicos recaudados por el gobierno del Estado también cayeron debido a la ‘petrodependencia’ no sólo de las finanzas, sino también de la economía, y si a las finanzas federales les dio gripa con la debacle petrolera, a la economía tabasqueña le dio pulmonía.
Señaló que Tabasco no es el mismo hoy que hace 10 años, y aunque la crisis petrolera afectó severamente la economía y la vida de los tabasqueños, los servicios de atención médica continúan operando, más allá de sus capacidades instaladas.
“El reto es aproximarse a la inversión ideal de 4 mil 283 millones de pesos anuales para brindar servicios de calidad con trato digno, pues la demanda de servicios crece exponencialmente por la situación económica”, expresó.
El jefe del Ejecutivo local aseveró que en Tabasco se empieza a ver la luz al final del túnel, pues se le abre una oportunidad histórica única, ante el hecho de que por vez primera un tabasqueño será el Presidente de todos los mexicanos: el Licenciado Andrés Manuel López Obrador.
“La Refinería de Dos Bocas que hace justicia a Tabasco, el Tren Maya y las plantaciones forestales, son 3 magnos proyectos que avanzan en la dirección deseable de nuestra necesaria diversificación productiva”, indicó.
Asimismo, aseveró que, a este hecho, hay que adicionar que el futuro Gobernador de Tabasco, Licenciado Adán Augusto López Hernández, ha hecho de la reconciliación de los tabasqueños la divisa principal de su discurso y de sus acciones. “En ese cometido cuenta con todo mi apoyo como tabasqueño cuyo compromiso con Tabasco no concluye con mi período de gobierno”.
Aseveró que, durante 48 años de vida pública, tanto al servicio de Tabasco como de la nación, “ser Gobernador de Tabasco ha sido el mejor y más honroso cargo público de mi vida. A donde me depare el destino estar a futuro mantendré el amor a esta tierra-agua, siempre por Tabasco”.
Finalmente, señaló que “por encima de intereses legítimos, regionales, sociales, ideológicos, partidistas o electorales, sé que sabremos estar, cada quien en su trinchera de lucha, en el arreglo de nuestra casa común, que es México, que es Tabasco”. (Fuente: Tabasco Hoy)