CIUDAD DE MÉXICO, MX.- El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, ofreció perdonar todos los casos de corrupción; pero en el momento en que tome posesión, sostuvo, no tolerará ningún caso. No apostamos a la persecución, no es mi fuerte la venganza ni vamos a empantanarnos persiguiendo corruptos, sostuvo; publicó La Jornada.
“Es un perdón, así. Es lo que se está planteando. Es decirle al pueblo de México: punto final, que se acabe la historia trágica, horrenda, de corrupción, de impunidad. Que se acabe la política entreguista, y que comencemos una etapa nueva, que ya inicie una nueva historia y que hacia adelante no haya perdón para ningún corrupto, que ya no se perdone a nadie y que se pueda juzgar al Presidente si es corrupto, a sus funcionarios, a sus familiares. Y que se destierre la corrupción de México para siempre”.
Aclaró: “no soy cacique, no aspiro a ser un dictador, yo soy demócrata, entonces no es darle la orden a los Poderes Judicial y Legislativo, que son independientes, de que se detengan procesos que se han iniciado por delitos de corrupción. Todo lo que esté en curso se tiene que concluir y la autoridad competente tiene que resolver”. (Fuente: La Jornada)