CHIAPAS, MX.- El Congreso Nacional Indígena (CNI), el Concejo Indígena de Gobierno (CIG) y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) dijeron que a Samir Flores Soberanes “lo mató el régimen neoliberal; no sabemos si el gobierno, los empresarios, sus cárteles delincuenciales, o los tres juntos”, publicó La Jornada.
“Los ofrecimientos hechos por Andrés Manuel López Obrador, no a los de abajo, sino a los dueños del dinero y del poder, las veladas amenazas en contra de quienes defendemos la vida, sentaron las bases del artero asesinato, del dirigente de Amilcingo, Morelos, ocurrido el pasado 20 de febrero”, mencionaron.
En un pronunciamiento conjunto de la tercera Asamblea Nacional, el CNI, el CIG y el EZLN explicaron que “las consultas que el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) organiza actualmente en torno al Plan Nacional de Desarrollo 2018-2024, el Tren Maya o el Corredor Transísmico son una simulación para su convalidación”.
Las consultas ciudadanas, populares e incluso las que se organizan bajo el amparo del Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), “tienen como fin convalidar dichos megaproyectos y revestirlos de una falsa legitimidad”, comentaron.
“Nuestros pueblos, en ejercicio de sus derechos fundamentales de autonomía y territoriales dicen no a las políticas y a los megaproyectos de despojo, muerte y destrucción, así como a las consultas que organizan los malos gobiernos para obtener el consentimiento a dichas políticas y a dichos megaproyectos”, dijeron.
“No tenemos duda que esta nueva etapa de gobierno profundizará el neoliberalismo y la integración forzada de nuestro país a la órbita imperial de Estados Unidos”, explicaron
“Va contra nosotros y nuestros territorios; va por el exterminio de nuestros pueblos en cada rincón, y para ello tiende una guerra que sufrimos hoy con luto y coraje. Nos vemos en esta asamblea general y en el conjunto de nuestros dolores vemos que es una guerra hecha de muchas guerras funcionando de forma integral, como si fuera una sola”, aclararon.
“Para los pueblos originarios el único ‘cambio verdadero’ es el aumento de las mentiras, los engaños, las persecuciones, las amenazas, los encarcelamientos, el despojo, los asesinatos, las burlas y desprecios, la explotación humana y la destrucción de la naturaleza; en suma: el aniquilamiento de la vida colectiva que somos”, expresaron.
“Eso que necesitan quienes orquestan la destrucción del mundo lo tenemos los pueblos, y lo vamos a defender de su transformación capitalista con nuestra resistencia y rebeldía, aunque, como lo estamos viendo, nos enfrentemos a la trama militar de dominación y represión que tiene al capital como estandarte, que lo mismo recurre a cuerpos policíacos, militares, grupos de choque, carteles de la droga y paramilitares”, advirtieron.
Abundaron: “Lo que arriba llaman ‘transformaciones’, para nuestros pueblos siempre han significado que nosotros ponemos los muertos en función de los intereses de las oligarquías y de los que tienen el poder, que son cada vez más poquitos y grandes, que no dejan de vivir de la opresión, explotación, y destrucción por los mismos de siempre. La llamada Cuarta Transformación sigue el mismo camino de sus tres predecesoras, aunque con más brutalidad y cinismo si posible fuera.
“El gobierno neoliberal que encabeza López Obrador tiene su vista puesta en nuestros pueblos y territorios, donde, con el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas, se tiende una red de coptación y desorganización, que abre el camino a una guerra que tiene nombre industrial, hecha de proyectos y violencias, que, junto con las otras guerras y redes de guerra, expanden una oscura telaraña de muerte en los pueblos originarios del país”, dijeron en su comunicado. (Fuente: La Jornada)