YUCATÁN, MX.- Ante el apagón que afectó a millones de usuarios el viernes pasado en la Península de Yucatán, atribuido por la CFE a un incendio provocado por cañeros entre torres de transmisión, especialistas advirtieron que se presentarán más cortes de energía por una razón de fondo: la falta de infraestructura de la propia empresa eléctrica.
Cynthia Bouchot, directora general de la consultora Energía CB, resaltó que la demanda en la región, de aproximadamente mil 700 megawatts (MW), es muy superior a la capacidad instalada de generación, de apenas 980 MW, por lo que el abastecimiento de energía desde otras zonas del País que presentan un superávit se vuelve relevante.
El problema, apuntó al respecto Víctor Ramírez, también especialista del sector, es que la Península de Yucatán está conectada al resto del Sistema Eléctrico Nacional a través de una sola línea de transmisión de alta tensión que, además, ya está saturada, dejando vulnerable a la región ante eventos como el del viernes.
“La línea de trasmisión está en el borde operativo porque en ocasiones la Península demanda más energía de la cual se puede llevar por este medio, entonces por eso se presentan estas ‘acciones remediales’, que les llama el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace), y que básicamente son apagones”, explicó Bouchot.
Arrambide coincidió y destacó que el apagón del viernes es el segundo que enfrenta la región en el año.
“La mala noticia es que van a seguir sucediendo y se va a agravar la crisis de energía en la Península de Yucatán con la llegada de turistas y del verano. Con el incremento de las temperaturas, todos van a querer tener el aire acondicionado encendido”.
Los especialistas coincidieron en que uno de los factores que ha contribuido al desbalance entre la generación y la demanda de energía es el retraso de proyectos de la primera subasta eléctrica de largo plazo.
Bouchot señaló que del total de los 9 proyectos de generación de energía en Mérida, que representan una capacidad de mil 344 MW, sólo uno está actualmente en operación y el resto están detenidos por consultas indígenas o amparos promovidos contra su construcción.
También añadieron que será difícil evitar más apagones en el verano, puesto que las inversiones requeridas tardarán en entrar en operación, sin embargo, consideraron que la agilización de las consultas indígenas podría tener beneficios en proyectos de generación que ya están avanzados.
Mientras tanto, por su aislamiento y falta de inversión, Yucatán tiene la segunda energía más cara del País, de 2.4220 pesos por kWh para la tarifa industrial GDMTH, contra una media nacional de 2.2167 pesos. El primer lugar en electricidad cara la tiene Baja California Sur, de 2.8587 pesos por kWh.
Aparte de los problemas estructurales, los especialistas criticaron que la CFE no supervise las actividades que se realizan, como las quemas, o de mantenimiento a las áreas. (Fuente: Agencia Reforma)