Por Leslie Gordillo
CANCÚN, MX.- Además de los ya conocidos blocks para construir casas, ya se han creado también trastes, comida, biofertilizantes e incluso un calentador solar con sargazo, lo que confirma que una vez que se le ponga precio al “oro de mar” o “flor de mar”, el problema del arribo masivo se acabará porque hay industria que puede crecer.
Carlos Gosselin Maurel, presidente del protocolo de Puerto Morelos y consejero consultivo de la Asociación de Hoteles de Cancún y Puerto Morelos, indicó que el Protocolo de Puerto Morelos demostró que el sargazo es el oro del mar, con industria que ya está produciendo, incluido un producto que podría utilizarse para el proyecto del Tren Maya.
“Lo que se hace en el protocolo es tener las fórmulas, los elementos y la cantidad exacta que se requiere para dárselo a los industriales… (en los trastes que se han creado) se está trabajando 30 por ciento sargazo, 70 por ciento de resinas, pretendemos revertir esto, que sea más sargazo, 40, 50, 60 por ciento y disminuir la cantidad de resinas. Allí están los productos industriales que se están trabajando”, presentó.
Andrés Muñoz, director de la empresa Energreen, presentó el calentador creado con parte sargazo y parte bioplásticos, que funciona con energía eléctrica y luz solar, el cual ya está instalado en diversas viviendas y tiene una operatividad exitosa.
“La idea es crear toda una bioindustria… el solecito (calentador) sirve para calentar 80 litros, con un costo instalado en 6 mil 500 a 7 mil pesos”, indicó.
Y mencionó que ante la entrada de la ley que prohíbe el uso de desechables, tener alternativas es una urgente necesidad, y el uso de platos y vasos hechos con sargazo, un producto que además es quintanarroense, se convierte en una oportunidad única, usando una capacidad de 10 toneladas de sargazo por día, pero la intención es procesar al menos todo lo que llega a Puerto Morelos, que es en donde se encuentra la planta. (Noticaribe)