Se veía venir.
Sólo a uno de cada cinco quintanarroenses les interesó ir a votar para definir a sus representantes en la próxima Legislatura.
Era totalmente previsible. La institución del diputado está totalmente desprestigiada.
Pero, el Instituto Electoral de Quintana Roo (Ieqroo) hizo poco o nada para atajar este escenario predecible de un alto abstencionismo.
Si bien es poco interesante una elección de diputados, el abstencionismo de casi el 80 por ciento establece que el Ieqroo hizo demasiado mal las cosas.
Y en realidad, la jornada más que un triunfo del abstencionismo es una sonora derrota del Ieqroo.
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RESPONSABILIDAD DE SU CONSEJERA PRESIDENTE, PARO ESO SI QUE BIEN CUMPLE ORDENES DE SU JEFE CJ
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