Respecto a las elecciones federales de 2018, el PRI tuvo una ligera recuperación de dos puntos porcentuales.
Hace un año tuvo el 10 por ciento de los votos, y en las elecciones del pasado domingo tiene 12 por ciento.
Pero, el PRI, que hace apenas cuatro años tenía todas las senadurías y diputaciones federales mayoría y los 11 ayuntamientos del estado, así como el control del Congreso del estado y la gubernatura no es la sombra de lo que llegó a ser en Quintana Roo.
Los resultados son alarmantes para la ex aplanadora, y aún más, si se coloca en su debido contexto el único distrito que gano el pasado domingo, que fue el de Cozumel, con Carlos Hernández, que en justa dimensión sería más un triunfo del llamado “PRIAN”, que del PRI.
En los otros 14 distritos, el PRI no obtuvo ni segundos lugares.
El tricolor fue tercero en 10 distritos y cuarto en tres.
Por si fuera poco, fue quinto en el sexto distrito.
Para la próxima elección, el PRI más que por el INE o por el Ieqroo, será regulado por la Profepa.