PLAYA DEL CARMEN, MX.- Los regidores Samaria Angulo, Fabiola Ballesteros y Carlos Guerra, calificaron de compleja la relación con la presidente municipal Laura Beristain, por falta de comunicación e información, así como por la lentitud en el proceso de mejorar y modificar los reglamentos.

Esta relación inició en septiembre pasado con una sesión de Cabildo suspendida, y ha transitado por diferencias expresadas casi a gritos, hasta el pasado miércoles, cuando la alcaldesa mejor guardó silencio y enfocó su atención en el teléfono celular, frente a las peticiones y reclamos de algunos ediles.

La panista Samaria Angulo afirma que ha llevado adelante su trabajo en la comisión de Igualdad de Género. La entrevista se interrumpe por la llegada de Laura Beristain que pasó a saludar. Se habla de todo incluyendo el tema de acoso sexual denunciado en la anterior sesión. Luego de cinco minutos se retira. “Es la primera vez que me viene a ver”, releva la edil.

Sostiene que sí ha sido convocada a todos los pre cabildos, pero no a ciertas actividades vinculadas con su comisión. “Me mantengo trabajando con los organismos del Gobierno del Estado como el DIF y el Centro de Atención para la Mujer”, acota.

Se queja de la lenta burocracia que existe para hacer reformas a los reglamentos municipales. Puede cambiarse y hacerlo más rápido, dice, sólo se requiere voluntad.

En este sentido coincide Fabiola Ballesteros, quien hace nueve meses presentó una propuesta para modificar aspectos de los derechos humanos y “sigue en la congeladora”. Sin embargo, admite que su comunicación con Laura Beristain es muy buena.

“Siempre me ha contestado las llamadas. El problema viene con su gabinete. No quiere dar información solicitada mediante oficios. Y vivimos una etapa en que tenemos un descrédito con la ciudadanía, probablemente ganado a pulso y debemos corregir esto. La transparencia es prioridad”, establece.

Con base en ello, no se explica el porqué los contratos con grupo Arco (limpieza de playas y recolección de sargazo) y PASA (renta de camiones recolectores de basura), permanecen en el misterio. “Es parte de la ética que debe tener un gobierno”, agrega.

El regidor de Morena, Carlos Guerra afirma “La comunicación con la presidente podría ser mejor. Ahora es como por encimita o a modo. No hay pleito con ella, hay respeto. Esa es mi percepción”.

Opina que es fácil dialogar porque “todos queremos lo mejor para nuestra ciudad”. Lo ejemplifica con el caso de una invitación a un evento a las siete de la mañana hecho por whatsapp, por parte del secretario General del Ayuntamiento casi a medianoche del día anterior.

“No hay cercanía. La información fluye muy lentamente. Muchas veces me entero por terceras personas de cuestiones de obra pública, que es la comisión que encabezo. En una palabra: falta voluntad política”, concluye. (Noticaribe) 

 

Comentarios en Facebook