CIUDAD DE MÉXICO, MX.- Un juez federal frenó este jueves por tiempo indefinido la orden de aprehensión contra Gilda Margarita Austin y Solís, madre del exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya, publicó El Financiero.
Patricio Leopoldo Vargas Alarcón, juez décimo de distrito de amparo en materia penal, consideró que se actualizan las hipótesis previstas en la ley para conceder dicha suspensión, pese a que la mujer está detenida en Alemania.
Y es que advirtió que con esta decisión se buscan prevenir daños o perjuicios de difícil reparación, toda vez que los delitos que le imputan a Austin y Solís (lavado de dinero y asociación delictuosa) no tienen señalada la prisión preventiva oficiosa.
“Se concedió a Gilda Margarita Austin la suspensión definitiva para efecto de que “no sea detenida con motivo de la ejecución de la orden de aprehensión hasta en tanto se defina en definitiva el juicio de amparo”, advirtió el juez al notificar la medida ratificada en el expediente 614/2019.
Para hacer efectiva la suspensión, el juez puso como requisito el pago de una fianza de 4 mil 500 pesos y la obligación de Gilda Margarita de presentarse ante el juez de control que libró la orden de aprehensión en su contra, mismo que tiene su sede en el reclusorio Norte de la Ciudad de México, en un plazo no mayor a cinco días.
De no cumplirse con estas medidas, la suspensión definitiva será revocada.
Gilda Margarita Austin y Solís fue detenida el pasado 24 de julio en Alemania, dijo Javier Coello Trejo, abogado de Lozoya, en entrevista con Grupo Fórmula.
“Estaba ella en Alemania con sus nietos, salió de vacaciones desde hace un mes, y ahí la detuvieron, en una isla, en territorio alemán”, explicó.
La Fiscalía General de la República (FGR) giró el pasado 5 de julio una orden de aprehensión en contra de Lozoya por el caso Odebrecht.
La dependencia también obtuvo órdenes en contra de Marielle Eckes, esposa de Lozoya; Gilda Lozoya, hermana del exdirectivo; Nelly Aguilera, una empresaria de bienes raíces, y Gilda Austin, madre de Lozoya. (Fuente: El Financiero)