Agencia Reforma
CIUDAD DE MÉXICO.- La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda replicará su modelo de trabajo en los Gobiernos de los estados como parte de su Estrategia Nacional contra el Lavado de Dinero.
El propósito principal de esta red de unidades será ubicar quién es el último beneficiario de un bien, sea monetario o inmobiliario.
La UIF a cargo de Santiago Nieto retomó el proyecto de las Unidades de Inteligencia Patrimonial y Económica (UIPEs) en los estados y desde enero está firmando convenios con los gobernadores.
Los estados recibirán recursos del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP) para concretar su operación.
Según los convenios signados, aunque las unidades dependerán de las fiscalías estatales, los gobiernos locales se comprometen a prestar toda la información fiscal, contable y financiera que sea de utilidad a la UIF.
Así como a generar reportes de inteligencia y lista de personas políticamente expuestas, la cual ya existe a nivel nacional.
Las unidades podrán solicitar el aseguramiento de cuentas, fincar responsabilidades administrativas y presentar denuncias por delitos en materia de lavado de dinero en el fuero común ante el Ministerio Público, del cual serán coadyuvantes.
De acuerdo con el proyecto, al que REFORMA tuvo acceso, Hacienda contempla tres modelos de UIPEs, que serán integradas por 13, 21 o 42 servidores públicos; el tamaño de cada una y sus recursos dependerán de la incidencia delictiva y la densidad demográfica.
Todas contemplan direcciones de tecnologías de la información y comunicación, de análisis patrimonial, económico y fiscal, así como áreas jurídicas y plazas de analistas.
La UIF ha suscrito hasta el momento acuerdos de colaboración con 29 Gobiernos estatales.
En 2011, en el seno del Sistema Nacional de Seguridad Pública se acordó por primera vez la creación de esas unidades, pero al cabo de dos años sólo fueron constituidas 10 y sólo funcionaban 7. (Agencia Reforma)