YUCATÁN, MX.- Andrés Manuel López Obrador descendió del avión que lo trasladó a la ciudad de Mérida y fue recibido por una andanada de protestas y demandas, publicó Diario de Yucatán.
Los manifestantes son maestros jubilados y pensionados, trabajadores del sector salud, pescadores y ejidatarios, entre otros, a quienes el mandatario ofreció atenderlos hoy o mañana en Tekax, Valladolid y Temozón.
En esta ocasión, a diferencia de la anterior, el gobernador Mauricio Vila Dosal no acudió a recibirlo.
La recepción en el aeropuerto Internacional de Mérida estuvo a cargo de Héctor Navarrete Muñoz, director regional del Grupo ASUR, y el comisionado regional de la Policía Federal.
Solo acompañaban al presidente su secretario personal y reporteros de medios nacionales.
Desde una hora antes de su arribó en la sala de espera se habían reunido maestros jubilados y pensionados que protestaban contra el Isstey y el gobernador por descuentos que no les aclaran.
También trabajadores de la Secretaría de Salud, del área de vectores, quienes se quejan de que reciben un sueldo de solo mil 800 pesos a la quincena, sin prestaciones.
Otros quejosos son pescadores que afirman que está “desaparecido” el delegado federal, quien “no nos da la cara”, y ejidatarios que piden pagos justos por sus tierras.
Cuando salía de la sala de equipaje el presidente fue abordado por una pasajera, quien dijo ser de un colegio de psicólogos, para preguntarle: “Señor presidente, quiero saber cómo está la economía aquí”.
Entonces, López Obrador jaló del brazo a Navarrete Muñoz y dijo: “Él es economista, es experto, le va a responder”.
Para sacar del apuro al presidente, y como único representante del Estado en la recepción, el director del Aeropuerto señaló que esta terminal aérea mantiene un crecimiento sostenido del 13.59% respecto al año anterior.
Precisó que ya recibieron en 2019 dos millones 300 mil pasajeros y esperan cerrar el año con más de dos millones y medio.
También dijo que están invirtiendo 300 millones de pesos en el remozamiento y ampliación del aeropuerto.
Al entrar a la sala de espera AMLO se encontró con un bloque de reporteros, camarógrafos y fotógrafos locales, quienes, entre empujones, codazos y pisotones, trataban de entrevistarlo, sin que respondiera a las preguntas que le hacían.
Luego los reporteros quedaron en medio del presidente y los grupos de inconformes. (Fuente: Diario de Yucatán)
