YUCATÁN, MX.- Un teléfono celular con valor superior a 20 mil pesos cayó en un pozo pluvial, por lo que trabajadores municipales de Motul emprendieron una operación de rescate que incluyó abrir un boquete en la acera con tal de recuperar el aparato, publicó Diario de Yucatán.
La odisea tuvo lugar apenas terminada la sesión solemne de Cabildo por el aniversario 148 de la ciudad de Motul, cuando el regidor Rodrigo Manuel Díaz Montero — del Partido Verde Ecologista de México— acompañado de su esposa embarazada tomó rumbo a su auto, pero al intentar abordarlo, la dama dejó caer su iPhone, con tan mala suerte que este se escabulló por una abertura en la acera.
De inmediato, Díaz Montero solicitó el apoyo del alcalde para permitirle romper el concreto, ya que aseguraba que detrás del agujero había una rejilla que impedía el paso de la basura al pozo pluvial, por lo que allí esperaba encontrar el teléfono.
Así, personal de Protección Civil acudió al sitio con mazos, picos y barretas para iniciar la operación rescate, no sin antes aclararle al pevemista que los gastos de la reparación de la acera correrían por su cuenta.
Pronto llegaron a la boca del pozo, solo para descubrir que no había rejilla y que el teléfono había caído al fondo; calculando al menos siete metros de profundidad.
Fue entonces que el alcalde —de extracción priista— ordenó suspender la operación: “Son siete metros, no vale la pena arriesgar la vida de nadie; si fuera un perrito o un gatito hasta yo me meto a rescatarlo, pero es simplemente un celular”.
Por su parte, Díaz Montero lamentó que, además del iPhone, su esposa también perdió su credencial de elector y varias tarjetas bancarias.
Posteriormente, tras casi doce horas de ocurrido el incidente, personal de servicios municipales acudió a reparar la acera con recursos, supuestamente, aportados por el regidor. (Fuente: Diario de Yucatán)
