CANCÚN, MX.- De forma separada, vendedores ambulantes vinieron hoy al Palacio Municipal a solicitar ayuda de regidores, pues ya no obtienen ingresos al paralizarse la actividad por la contingencia sanitaria, y buscar otro trabajo en este momento es una imposibilidad. Incluso, uno denunció que agentes policiacos le impiden realizar su labor.
José Ascencio Vaca, quien se dedica a la venta de tamales en la calle, dijo que de él depende su esposa, dos hijos y un adulto mayor, pero ya se ha quedado sin dinero ni forma de obtener más.
Indicó que estaba ofreciendo su producto cuando lo abordaron unos agentes de la Policía Estatal, que le indicaron que ya no podía hacer esa actividad, por el riesgo de contagio de COVID-19.
De todas maneras, indicó, ya no hay gente en la calle, por lo que no hay venta. Tampoco puede salir a buscar otro trabajo, pues la mayoría de los locales están cerrados.
“No hay empleo ahora, es por eso que estamos aquí. Si pudiera trabajar, no vendría a pedir apoyo”, comentó.
Hoy es el segundo día que viene, le indicaron que a las 11 aparecería algún regidor, pero ya daban la una de la tarde y las oficinas en el Cabildo lucían igual de desoladas.
En la misma situación está Norma Campos Goyi, bazarista, quien es madre de tres hijas, y cuyo marido también se dedicaba al ambulantaje. Ahora han comenzado a desesperar.
“El tianguis está muerto. Ayer fui y vendí 30 pesos; con eso no se sobrevive. Hay mucha gente que no tiene qué comer. Debo todo y no tengo cómo pagar; tengo mercancía pero no se vende”, afirmó.
Ya intentó en Gestión Social y le indicaron que se repartirían despensas la semana próxima, lo que la inconforma, pues sus hijas necesitan comer ahora.
“Estoy desesperada, el sábado vino la casera a cobrar la renta y no le pude pagar, ayer vino de nuevo. Me dice que le dé la mitad, que son 600 pesos, pero ¿qué puedo hacer, de dónde lo saco? Robar no puedo, me iría al bote”, comentó la mujer, visiblemente agitada.
En la colonia El Milagro, dice que hay muchas personas en la misma situación que de no tener una solución, podría generarse un problema mayúsculo.
Se quejó amargamente de que por segundo día tenga que esperar a los regidores durante horas, cuando se supone que son servidores públicos.
“Ahora es cuando tenemos una emergencia y ellos debieran estar aquí, pero ellos no se preocupan por la comida, todo lo tienen ‘a boca de jarro’; cobran su sueldo, hacen su despensa bien conchas y vienen a trabajar a la hora que quieren”, reclamó.
NO ES SALUBRE
Entrevistado por separado posteriormente, el secretario general del Ayuntamiento, Jorge Aguilar Osorio, dijo ignorar que policías estuvieran molestando a ambulantes, pues no existe esa indicación, pero también debe entenderse que estamos en una pandemia y el ambulantaje es ahora un foco de contagio.
“Es difícil que ellos mantengan las medidas de higiene, cuando es la misma persona que manipula los alimentos, cobra, se acerca a los clientes, le sopla a las bolsas para meter los chicharrones”, comentó.
En estos momentos, lo preferible es que todos estén en sus casas, afirmó, enfatizando que el ayuntamiento ya trabaja en ayudar a quienes viven al día. (Agencia SIM)