CANCÚN, MX.- De acuerdo al centro de Investigación en Política Pública del Instituto Mexicano de Competitividad (IMCO), ubica a Quintana Roo como el estado más impactado económicamente por la pandemia del COVID-19, al ser la entidad más dependiente del turismo y servicios recreativos que representan el 25 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB), seguido de Baja California Sur con el (14%), Nayarit (13%), Guerrero (7%) y Oaxaca (4%).
IMCO recomienda que para mitigar el impacto negativo de una desaceleración económica en el bienestar social es necesario que los gobiernos comiencen a planear e implementar políticas de apoyo financiero que permitan a familias y empresas solventar una disminución significativa de sus ingresos.
Añade que, los primeros sectores de la economía en ser afectados por medidas de distanciamiento social serán los de servicios como hoteles, restaurantes, turísticos y otros servicios recreativos porque sus ingresos dependen del consumo en establecimientos, la llegada de turistas y las aglomeraciones sociales.
Ante la expectativa de bajo dinamismo en los sectores económicos más importantes de sus estados, algunos gobernadores han anunciado la implementación de medidas de mitigación:
Quintana Roo: ha propuesto estímulos fiscales para evitar el despido de trabajadores, diferimiento de pago de impuestos y ampliaciones del pago de subsidios.
Baja California Sur: el anuncio beneficios fiscales fue acompañado de una propuesta para posponer el pago del impuesto sobre la nómina y revista vehicular, así como la suspensión de actos de fiscalización.
Oaxaca: destacó una inversión de 180 millones de pesos para la economía local y un estímulo fiscal del 100% al impuesto a servicios de hospedaje.
IMCO propone
Implementar medidas oportunas para proteger los ingresos de familias y empresas del sector de servicios.
Dar prioridad y enfocar recursos federales de apoyo hacia estados turísticos.
Hallar sectores relacionados para una segunda etapa de medidas económicas.
Considerar descuentos en el pago de impuestos sobre hospedaje e impuestos sobre la nómina, especialmente a micro, pequeñas y medianas empresas.
Generar un plan de reactivación económica turística después de la contingencia generada por el COVID-19. (Con información del IMCO)