CANCÚN, MX.- El pasado 13 de marzo se registraron oficialmente los primeros dos casos de coronavirus en la península de Yucatán: un caso en Yucatán y un caso en Quintana Roo el mismo día.

En ambos estados, se aseguró, se trataba de contagios externos que implicaban a ciudadanos extranjeros.

Un mes después, la situación es radicalmente distinta y los casos se han disparado tanto en Yucatán como en Quintana Roo, aunque es en el Caribe mexicano donde las alertas se han prendido porque el ritmo de contagios es el mayor en todo el Sureste y uno de los más altos en el país, duplicando los enfermos y muertos del estado vecino.

Al cumplirse un mes de los primeros casos de COVID-19 en la Península, Yucatán tiene 108 casos confirmados con 8 decesos, mientras que Quintana Roo suma 232 enfermos y 19 muertos, es decir, más del doble que su vecino.

Las primeras semanas, el ritmo de contagios avanzó de manera similar en ambos estados, tanto en contagios como en muertos por esta enfermedad, pero a principios de abril algo pasó porque los caminos de Yucatán y Quintana Roo en la lucha contra el coronavirus se empezaron a bifurcar y hoy la distancia es grande.

Cancún, destino turístico internacional que hoy no tiene ni el cinco por ciento de ocupación por el desplome de la industria de viajes, está convertido en el principal foco de contagios con 166 casos confirmados y 8 decesos, más casos que todo Yucatán y el mismo número de muertos que el vecino estado.

En segundo lugar está el municipio de Solidaridad que presenta 43 casos y 7 muertos.

Atrás le siguen municipios como Tulum con 4 casos y dos muertos, Othón P. Blanco con 7 casos y dos muertos, Cozumel con siete casos confirmados, y Bacalar, Felipe Carrillo Puerto, Puerto Morelos, José María Morelos e Isla Mujeres, con un caso cada uno.

Un mes después, Lázaro Cárdenas es el único municipio de Quintana Roo que no tiene registrado casos de coronavirus.

Ayer domingo,  la Secretaría estatal de Salud (Sesa) confirmó que hasta las 18 horas del 12 de abril se han notificado 416 casos negativos, 192 en estudio, 232 positivos, 19 defunciones y 43 personas recuperadas de la enfermedad.

La dependencia precisó que se hicieron ajustes a la plataforma nacional de acuerdo con los lineamientos de la autoridad federal.

La Secretaría de Salud consideró necesario hacer el apunte de que los casos reportados hoy como negativos son menores con respecto al día de ayer, pero que a pesar de la diferencia numérica, lo relevante es que los contagios continúan avanzando en la entidad y es importante quedarse en casa.

La Sesa dio a conocer que 105 personas se encuentran bajo tratamiento en aislamiento social, 65 hospitalizados.

ESTRATEGIAS PARALELAS CON INTENSIDADES DIFERENTES

Al cumplirse un mes de los primeros casos de coronavirus en Yucatán y Quintana Roo, las estrategias para frenar la ola de contagios y enfrentar el desplome económico han sido similares en ambos estados aunque aplicadas en diferentes tiempos y con niveles diferentes de intensidad.

Mauricio Vila fue de los primeros gobernadores en aplicar medidas de restricción cada vez más estrictas, tomando la iniciativa por encima de la prudencia y lentitud mostrada por la estrategia del gobierno federal.

Esta actitud también se empezó a replicar en Quintana Roo con Carlos Joaquín González, aunque con medidas que inicialmente no fueron tan drásticas como las de Mauricio Vila que prácticamente ha restringido de manera obligatoria la movilidad en Yucatán con amenazas de sanciones e, incluso la cárcel en el caso de personas que sabiendo que son portadoras del coronavirus salgan a las calles a exponer a los demás.

En Yucatán, todas las actividades no esenciales fueron suspendidas desde las primeras semanas del registro del primer caso, mientras que en Quintana Roo está medida tardó unos días más.

Hoy tanto en Quintan Roo como en Yucatán se han cerrado playas, plazas comerciales y otros sectores que afectan a la economía, incluso con llamados de la fuerza pública.

Sin embargo, en Quintana Roo, pese a las campañas y llamados para que la gente se quede en casa, ha costado más trabajo que la gente entienda la necesidad de mantener la cuarentena, lo cual quizá sea parte de la causa de que hoy los contagios sean mucho mayores que en Yucatán, además de la mayor exposición que tuvo el estado en las etapas previas por la presencia de turistas europeos y estadounidenses, cuyos países han sido durante el último meses los principales focos de propagación de la pandemia.

Hay que mencionar que ambos gobernadores, tanto Mauricio Vila como Carlos Joaquín González, además, han anunciado sus propios programas de apoyo a la población más vulnerable con ofrecimientos de un especie de bono de sobrevivencia o la entrega de despensas para ayudarles a pasar lo más difícil de esta crisis, o con descuentos en el pago de servicios básicos e incentivos fiscales, aunque la efectividad de estas medidas aún están por verse.

Lo cierto es que un mes después, el dato duro que dan las cifras, ponen a Quintana Roo bajo los reflectores por el mayor número de contagios y muertos por coronavirus que obligan a revisar las medidas de restricción a la movilidad porque no se están cumpliendo las expectativas de mantener bajo control a la enfermedad. (Noticaribe)

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