Por Itzel Chan
MÉRIDA, MX.- Los estados de la Península de Yucatán presentan altos índices en comparación con otros, en los que las personas que son acusadas de algún crimen reciben presiones o amenazas para declararse culpables ante el Ministerio Público, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Población Privada de la Libertad (Enpol).
Yucatán, Quintana Roo y Campeche, están dentro de las ocho entidades que presentan los rangos más altos de amenazas en cuanto una persona es acusada de algún delito.
Para ser más precisos, Quintana Roo y Morelos encabezan la lista con un 38.5% de las personas que han sido acusadas y fueron víctimas de amenaza, y tan sólo después de Chiapas, Guerrero y Tamaulipas, se encuentra Campeche y Yucatán, con un 34.6% y 32.1%, respectivamente. En último lugar se ubica Tlaxcala y de ahí el resto de los estados.
Entre las prácticas más comunes en las entidades donde se presenta esta problemática, las personas declararon que han sido aisladas e incomunicadas, además de que se les amedrentaba que de no aceptar ser culpables, se les levantarían cargos falsos.
Otras acciones que tanto judiciales como elementos policíacos han cometido es desvestir a las personas, atarlas, vendar los ojos, les impiden respirar o amenazan con dañar a su familia.
La encuesta también reveló que es frecuente que durante el proceso de detención, los responsables pateen a los presuntos culpables, les den puñetazos, les den descargas eléctricas, los quemen, les provoquen lesiones con armas blancas o de fuego e incluso, que procedan a la violación sexual.
Es preciso recordar que en el caso de Yucatán, la Comisión de Derechos Humanos del Estado(Codhey) ha documentado en un periodo de 2007 a 2019, sólo 53 casos de torturas en el estado, emitidas por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
El caso más reciente de sospecha de tortura se registró en marzo de este año. Incluso el hombre detenido murió dentro de una patrulla de la SSP y la necropsia contratada por sus familiares reveló que murió ahogado en su propia sangre, presuntamente tras ser torturado por policías, mientras que la Fiscalía General del Estado (FGE) reveló que murió por broncoaspiración. (Noticaribe)