CIUDAD DE MÉXICO, MX.- Poco más de un centenar de personas embozadas rompen mobiliario urbano, saquean comercios y derriban señalamientos durante su marcha hacia el Zócalo capitalino, publicó La Jornada.

Los tapiados colocados en algunos inmuebles de servicios como Banamex fueron quitados y rotos sus cristales, igual que una sucursal de Starbucks, ubicado en la Glorieta de Colón, que fue el primero dañado y saqueado.

El grupo de “anarquistas”, como se ha dado en llamar, quitó los carcos del Hemiciclo a Juárez, con tubos y martillos dañó escoltas y los grafiteó; mientras otros quitaban las vallas metálicas colocadas en la Alameda Central y unos más rompían los cristales de puestos ubicados en avenida Juárez.

Petardos y líquido de extintores son arrojados sobre representantes de medios de comunicación “vendidos”.

A las 4:20 empezaron a ingresar los manifestantes a la plaza del Zócalo, luego de casi media hora de grafitear, dañar o romper cristales de edificios ubicados en Avenida 5 de Mayo. Los cerca de 200 jóvenes, en su mayoría vestidos de negro, con cubrebocas, paliacates o turbantes, se han dedicado a saquear tiendas como Adidas, y destruir cámaras de videovigilancia privada al grito de la canción “Dale, Dale”.

Con tubos y cadenas que portan golpearon las cortinas de establecimientos mercantiles y la puerta del hotel Majestic, pero no pudieron derribarlas.

No obstante, sí lograron romper cámaras de videovigilancia ubicadas en su cruce con Monte de Piedad.

Trabajadores de establecimientos de hospedaje tomaron imágenes desde un primer piso de los desmanes que realizaban.

Un grupo de policías se mantiene en Madero y Palma observando a los manifestantes.

Dada la manifestación, el Sistema de Transporte Colectivo Metro informó que se cerraron todos los accesos de la estación Zócalo de la Línea 2 hasta nuevo aviso, por lo que pidió a los usuarios tomar previsiones.

Cerca de las 5:30 la marcha continuaba hacia la Fiscalía General de Justicia de la ciudad de México, ubicada en la colonia Doctores, por la calle 5 de febrero, donde los manifestantes avanzan dañando negocios y saqueando tiendas de conveniencia, sin encontrarse un solo elemento de la policía a su paso.

El subsecretario del Gobierno de la ciudad, Arturo Medina, ha seguido la manifestación desde el inicio en el Ángel de la Independencia.

Cerca de las seis de la tarde los manifestantes arribaron al edificio de la Fiscalía General de Justicia, donde rompieron los cristales de ventanas y realizaron pintas. (Fuente: La Jornada)

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