El fin de semana, entre la noche del sábado y la madrugada de domingo, se reportó la muerte de una mujer en los separos de Seguridad Pública de Solidaridad.
La versión oficial de las autoridades es que la mujer se accidentó cuando viajaban con un hombre a bordo de una motocicleta durante una supuesta persecución policiaca.
Las autoridades acusan que la pareja, momentos antes, habían participado en un episodio de balazos contra una vivienda y de haber dejado una supuesta narcomanta.
Tras el supuesto accidente, según la versión oficial, el hombre habría quedado herido por lo fue trasladado a un hospital, pero la mujer estaba bien, por lo fue llevada a los separos de Seguridad Pública, donde inexplicablemente murió momentos después de ser ingresada.
Supuestamente un médico legista la revisó antes de que fuera ingresada a las celdas y determinó que la mujer estaba bien.
Este es el quinto caso de una muerte no aclarada en los separos de Seguridad Pública de Solidaridad tan sólo en la administración de la morenista Laura Beristain y que actualmente preside el comandante Jorge Robles Aguilar.
En junio, julio y agosto del 2019, se registraron los tres primeros decesos de personas detenidas por faltas administrativas y que terminaron muertas en los separos. El cuarto caso fue en enero de este año y ahora esta mujer.
Sin embargo, en este último deceso inexplicable, a pesar del silencio de las autoridades municipales que no se han pronunciado ni siquiera por realizar una investigación, hay indicios y testimonios que permiten anticipar que el escenario podría complicarse y revelar una trama de complicidad y ocultamiento al interior de Seguridad Pública.
Estos indicios apuntan que el accidente no fue accidente y que los policías municipales fueron más allá de sus facultades para capturar a esta supuesta pareja que, según la policía, habría participado antes en un supuesto hecho delictivo.
Hasta donde se sabe, al lugar del ‘accidente’, llegaron paramédicos que se llevaron al hombre dada sus heridas visibles, pero que los policías no permitieron que la mujer fuera revisada y así se la llevaron a los separos de Seguridad Pública.
Hay otros indicios, testimonios y hasta videos que podrían darse a conocer en los próximos días sobre este caso que pondrían en tela de juicio la versión oficial.
La Comisión Estatal de Derechos Humanos también se verá presionada porque ya tiene información de este caso diferente a la oficial y podría ordenarse una investigación a profundidad de estos hechos.
Los familiares de la víctima tienen su propia versión de los hechos y podrían llevar el tema a la esfera mediática.
Independientemente si la pareja estaba involucrada en un hecho delictivo o no, los indicios podrían revelar que los policías de Seguridad Pública de Solidaridad no acataron protocolos y actuaron más allá de lo que el deber permite con saldo de una mujer muerta.
Con lo que se sabe, este caso podría ser el detonador que devele que algo se está pudriendo en una corporación policiaca que no funciona, pero que es tolerada y solapada por las autoridades políticas del municipio y del Estado.
