CIUDAD DE MÉXICO, MX.- La Físcalía de Justicia de la Ciudad de México logró identificar a una familia completa dedicada al fraude contra particulares; el modus operandi consistía en adquirir vehículos de lujo que pagaban con cheques sin fondos, para posteriormente rematar los autos y obtener así pingües ganancias que les permitían vivir cómodamente, publicó c4noticiasmx.com.
La banda de defraudadores está integrada por la familia Soto Jiménez. La madre, Cristina Jiménez; el padre, Guillermo Soto Ortega; y los hijos Brenda Guadalupe, José Hareff y Guillermo. Otros miembros de la banda son Jan Carlo, Javier Vega, alias Sacro y su esposa Luz Aurora.
Los defraudadores abordaban a particulares que ofrecían autos de marcas de lujo, como Porsche, Lamborghini, Mercedes-Benz y BMW, entre otras; convencían a los vendedores de aceptar el pago mediante cheques que más tarde era incobrables y los autos eran revendidos a un precio mucho más bajo del real.
El primero en ser identificado como miembro de la banda fue Guillermo Soto Jiménez, quien ya se encuentra detenido en el Reclusorio Sur de la CDMX.
Al menos dos víctimas han acudido a la Fiscalía para identificar al detenido, quien se hacía pasar como un empresario adinerado para defraudarlos. El acusado se trasportaba en autos de lujo, presentaba documentos falsos, decía ser exitoso y adinerado y de esa forma se ganaba la confianza de los incautos.
Entre los nombres que usaba Guillermo Soto, de 25 años de edad, están los de Fernando Javier Rosas Lugo y Camilo Ibarra Gómez.
Trascendió que con el dinero de los fraudes, el ahora detenido habría viajado por el mundo, pues presumía de conocer Egipto, Dubai y París, entre otras naciones. (Fuente: c4noticiasmx.com)