CANCÚN, MX.- Después de meses de estar cerrado e inactivo, este domingo finalmente abrirá sus puertas en Cancún la reproducción de la Capilla Sixtina, atractivo totalmente gratuito, con medidas especiales para reducir el riesgo de contagio de COVID-19.
En rueda de prensa y acompañado por el obispo de la Diócesis Cancún-Chetumal, Pedro Pablo Elizondo Cárdenas, así como representantes de Banorte, entidad que financió esa colosal empresa, el director de la Capilla Sixtina en México, Antonio Berúmen señaló que después de meses de espera, pues llegaron en febrero, justo antes del inicio de la pandemia, finalmente pueden abrir sus puertas en Cancún, al cambiar el semáforo a amarillo.
Las visitas son gratuitas y no se permitirá la venta de boletos, aseguró. Quienes quieran venir, pueden reservar el día y la hora de su visita en la página web capillasixtinaenmexico.com, o si no tienen internet, llegar directamente y ser colocados en una fila separada.
La capilla se quedará en Cancún el tiempo que haga falta para que todos quienes quieran visitarla puedan hacerlo e incluso esperan llegar a su visitante 5 millones, desde su llegada al país (ya ha estado en otras ciudades).
Sobre la gestación de esta reproducción en tamaño real, Antonio Berúmen mencionó que ellos también realiza el proyecto “Manos del Mundo”, en el que llevan a artesanos de México a vender sus productos en los museos del Vaticano.
“Una señora de Hidalgo, de 69 años, que jamás había salido de su comunidad, hizo un recorrido por la Capilla Sixtina, se puso a llorar y dijo que pensó que moriría sin poder verla”, narró.
Esto conmovió mucho a los de este proyecto, pues hay muchísimas personas en el país que probablemente nunca tendrán la oportunidad de ver esta maravilla pictórica, por lo que se pensó en generar una réplica idéntica, tanto por fuera como por dentro.
Lograr esto con una estructura que además fuera móvil fue una tarea de ingeniería que tomó dos años de planeación, a lo que se añadió el desafío de la reproducción de los inmortales frescos de Miguel Ángel, pues las últimas fotografías de los mismos databan de 1992, pero carecían de la resolución necesaria para una réplica fidedigna.
Se trabajó mil 70 días y 170 noches, comentó, para poder obtener 2 millones 700 mil fotografías, para obtener una reproducción plana en alta definición de estos frescos, que incluyen la bóveda, cóncava, que tuvo que ser mapeada por ingenieros, con fotografías de 3 centímetros.
Por ser un proyecto pensado para ser visitado de forma gratuita, se tuvo que obtener financiamiento externo, por Banorte, además de la autorización del Papa Francisco.
Antonio Berúmen indicó que esta es una réplica de un patrimonio de la humanidad, para ser disfrutados por todos, creyentes o no.
Por su parte, el obispo Pedro Pablo Elizondo Cárdenas señaló que aunque cualquiera puede disfrutar la importancia artística, histórica y cultura, para los creyentes tiene además un significado especial religioso.
Festejó también que la visita de esta réplica ocurra en el año en que la antes Prelatura (hoy Diócesis) Cancún-Chetumal cumple 50 años. (Agencia SIM)