CHIAPAS, MX.- Domingo López Ruiz, ex alcalde de Chamula y uno de los “mayores promotores de la expulsión de indígenas evangélicos” en ese municipio de los Altos de Chiapas hace más de dos décadas, fue asesinado a balazos, dieron a conocer fuentes gubernamentales, publicó La Jornada.
Dijeron que el ex munícipe fue asesinado en un predio de cinco hectáreas que desde hace 15 años tenía en la colonia Tzementé, municipio de Yajalón, en el norte de la entidad. Se encontraron varios casquillos percutidos.
López Ruiz, de 61 años, era profesor jubilado; fue nombrado alcalde interino de Chamula en junio de 1993, luego de la renuncia de Lorenzo Pérez Jolote, también militante del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El pastor Esdras Alonso González, dirigente de la iglesia evangélica Alas de Águila, dijo que durante su gobierno se intensificaron las expulsiones de indígenas de Chamula que se habían convertido al protestantismo.
Según diversas estimaciones, más de 30 mil habitantes de Chamula fueron expulsados desde la década de 1960 por caciques priistas tradicionalistas, con la excusa de que se habían hecho evangélicos o eran afines a la diócesis de San Cristóbal, entonces encabezada por el obispo Samuel Ruiz García.
Acumuló 57 denuncias; nunca lo investigaron
Alonso González recordó que en un año López Ruiz acumuló 57 averiguaciones previas en su contra por delitos relacionados con las expulsiones (privación ilegal de la libertad, despojo, daños y otros) “y ninguna fue consignada por los agentes del Ministerio Público por orden del gobierno estatal”.
Añadió que inclusive “mandaron a volar” una recomendación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH). Fue una historia de “impunidad”.
Manifestó que el 5 de julio de 1994, a seis meses del alzamiento armado zapatista, López Ruiz fue secuestrado por un grupo evangélico armado. Desde hacía medio año 587 protestantes chamulas se habían plantado en la entonces Dirección de Asuntos Indígenas, con sede en esta ciudad.
El edil fue liberado después de dos días, sobre ello, en 20 de febrero de 2006, Pérez Jolote, cuya renuncia dio paso al nombramiento de Domingo López Ruiz, recordó que después del secuestro, este regresó a gobernar el municipio, pero “ya no era el mismo. Estaba triste y debilitado”. (Fuente: La Jornada)