Por Itzel Chan
MÉRIDA, MX.- Asumiendo el riesgo político, el alcalde de Motul, Roger Aguilar Arroyo, aseguró que no seguirá las recomendaciones de acuerdo con las indicaciones federales ni estatales, por lo que por decisión propia, a partir de mañana, vuelven restricciones al municipio, ante el aumento de casos de coronavirus (COVID-19).
“Las estadísticas de la Secretaría de Salud son unas y las reales, son otras. La Secretaría de Salud no registra todos los casos de COVID-19 porque no todas las personas son identificadas porque están en sus casas, tienen temor de ir a los hospitales, están falleciendo en sus casas”, aseguró el alcalde.
Sobre las cifras, el alcalde dijo que, por ejemplo, de manera oficial, esta semana se han confirmado alrededor de 25 casos de COVID-19, pero en sí son más fuertes las cifras reales.
“De manera oficial tenemos una muerte por COVID-19, pero al día de hoy hay siete muertes que no son confirmadas como casos y son reportadas como muerte natural. Al día hasta tres personas acuden a pedir apoyo por gastos funerarios. Sea como sea, el virus sigue entre nosotros”.
Aguilar Arroyo tomó la decisión de que a partir de mañana se apagarán las luces de los parques y áreas deportivas con el fin de que ya nadie esté fuera de sus casas en horario nocturno e instruirá el cierre de cantinas y bares.
“Están muriendo ricos y pobres, niños y viejos, están muriendo todos. Estamos en pleno repunte y no vamos a esperar a que las autoridades nos marquen que estamos en semáforo rojo, no esperaremos las medidas estatales ni federales”.
A pesar del cierre de bares y cantinas, el alcalde anunció también que no se prevé que se aplique ley seca. (Noticaribe)