VERACRUZ, MX.- Pobladores de Hidalgo Amajac, municipio de Álamo Temapache, al norte de Veracruz, descubrieron una escultura femenina de casi dos metros de altura, al interior de un terreno citrícola, publicó El Heraldo de México.
El pasado 4 de enero, expertos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) confirmaron que la pieza es prehispánica y que es la primera de su tipo localizada en la cuenca del río Tuxpan, al sur de la huasteca veracruzana. De acuerdo con la investigadora del Centro INAH Veracruz, María Eugenia Maldonado Vite, encargada de la inspección en campo, esta pieza representa a una joven mujer de élite.
“Posiblemente gobernante por su postura y atavíos, más que a una deidad como se han interpretado casi todas las esculturas huastecas femeninas, a las cuales se vincula con la diosa Tlazoltéotl”, expresó la especialista.
La figura fue elaborada en roca caliza y mide 60 centímetros en su parte más ancha y alrededor de 25 centímetros de grosor. Su buen estado de conservación permite observar sus rasgos, así como su espiga, elemento que permitía contemplarla erguida.
La mujer luce un rostro pequeño, ojos abiertos y huecos, mismos que debieron rellenarse con obsidiana u otra piedra. Tiene un tocado alto, un collar al centro del cual se distingue un adorno en forma de gota, conocido como oyohualli, un torso ataviado con una camisa de mangas largas y una larga falda que llega hasta los tobillos y revela el par de pies desnudos.
La especialista añadió que dada su ubicación geográfica entre los sitios arqueológicos de los municipios de Tuxpan y Castillo de Teayo, la pieza está ligada a la tradición escultórica y a la cultura huasteca.
“Aunque presenta ciertos rasgos del centro de México, cuando en la región se hizo notoria la influencia de la Triple Alianza, lo que la colocarían temporalmente hacia el Posclásico Tardío (1450-1521 d.C.)”, señaló.
En la vista de inspección, la arqueóloga notó que la pieza estaba dentro de un sitio arqueológico hasta ahora desconocido pero extenso. En éste no se han reconocido estructuras monumentales cercanas, sino más bien estructuras bajas, probablemente habitacionales, por lo que una probabilidad es que la talla, que se encontraba boca abajo, causó que pareciese una piedra a los ojos de los pobladores, y fuera movida de su lugar original y llevada hasta allí, incluso, desde tiempos prehispánicos.
“El estilo de la joven de Amajac es similar a representaciones de diosas huastecas de la tierra y la fertilidad, pero con una influencia externa, posiblemente nahua, como se aprecia en el hueco de los ojos para incrustaciones, rasgo que no pertenece a la escultura huasteca clásica sino más bien a la mexica. Además, el paño que presentan las mujeres huastecas frente a la falda es siempre liso, y en ésta existe un adorno de nudos y listones”.
La investigadora del Centro INAH Veracruz dijo que aún faltan más análisis sobre esta destacada pieza arqueológica, así como en el sitio arqueológico donde fue hallada y que por ahora se denomina Hidalgo Amajac.
Tales estudios, cuyos pormenores deberán ser definidos en diálogo entre el INAH, el Ayuntamiento de Álamo y la comunidad, permitirán indagar mediante recorridos iniciales en superficie, en la extensión del sitio, su temporalidad y filiación cultural, entre otras características.
Por el momento, la escultura de la joven de Hidalgo Amajac permanece bajo resguardo de los propietarios del terreno citrícola en el cual fue descubierta. Se dialogará entre el INAH y las partes interesadas para definir su emplazamiento futuro.
Maldonado Vite indicó que este hallazgo no sólo arroja más luces sobre la existencia de una consolidada tradición escultórica en la región, sino que es ejemplo de las representaciones de mujeres de alto estatus social o político en la huasteca.
“Las cuales se han malinterpretado como Tlazoltéotl, pero que se distinguen de esta deidad al no portar nariguera, boca con chapopote, ni tener husos con borlas de algodón, a la par que reitera la importancia de las mujeres en la estructura política huasteca”, agregó.
Sobre este descubrimiento, la secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero, indicó que estas representaciones prehispánicas permiten confirmar la participación activa de mujeres gobernantes en la estructura social y política huasteca.
Por su parte, el director general del INAH, Diego Prieto Hernández, reconoció el trabajo que realizan las representaciones estatales del Instituto para el reconocimiento, recuperación, investigación y rescate del patrimonio histórico de nuestro país.
“Esto magnífica representación femenina permite corroborar lo plasmado en las fuentes etnohistóricas acerca del papel relevante de las mujeres en esta región cultural, al tiempo que abre nuevas líneas de investigación en torno al esplendor de la Huasteca desde la época prehispánica”, enfatizó. (Fuente: El Heraldo de México)