ESTADOS UNIDOS.- Evan Rachel Wood, conocida por sus papeles como Reina Iduna en la película «Frozen II» o Dolores Abernathy en la serie «Westworld», y una de las activistas más combativas del movimiento #MeToo, ha acusado al cantante Marilyn Manson (cuyo nombre real es Brian Warner) de abusos sexuales y psicológicos, publicó abc.es.
La actriz, que empezó a salir con el músico poco después de conocerle cuando tenía 18 años, lo ha anunciado en su cuenta de Instagram con este comunicado: «El nombre de mi abusador es Brian Warner, más conocido por el mundo por el alias de Marilyn Manson. Él empezó a seducirme cuando era una adolescente y durante años abusó de mí de manera horripilante. Me lavó el cerebro y manipuló para ser sumisa hacia él. Estoy harta de vivir con miedo a recibir represalias, calumnias o chantajes. Estoy aquí para desenmascarar a este peligroso hombre y para poner en su sitio a las industrias que han permitido su comportamiento antes de que arruine más vidas. Expreso mi apoyo a todas las víctimas que ya no van a permanecer calladas».
Cuando Rachel Wood dice «el nombre de mi abusador es…», está aludiendo a un testimonio anterior, en el que reveló que había sufrido abusos, pero sin decir el nombre del autor de los mismos. Lo hizo en una entrevista con la revista «Rolling Stone» en 2016, y volvió a contarlo en 2018, ante un Subcomité Judicial de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, como parte de una campaña para lograr que se aprobase la Declaración de Derechos de Sobrevivientes de Agresión Sexual en los cincuenta estados.
«Mi experiencia con la violencia doméstica fue la siguiente: abuso mental, físico y sexual tóxico que comenzó lentamente pero se intensificó con el tiempo, incluidas amenazas contra mi vida, graves lavados de cerebro y lavados de cerebro, despertar al hombre que decía amarme violando lo que creía ser mi cuerpo inconsciente». También fue por el mismo motivo al Senado de California, donde dijo que había sufrido «episodios de celos extremos que a menudo terminaban con mi novio destrozando nuestra casa, arrinconándome en una habitación y amenazándome».
A raíz de esta revelación, Rachel Wood ha compartido las declaraciones de otras cuatro mujeres que han denunciado públicamente que también sufrieron abusos por parte de Warner. Una de ellas, llamada Gabriela acusa al artista de haberla atado y violado en la habitación de un hotel, y todas ellas señalan que «es un drogadicto» que las sometía a «tortura psicológica» y «tácticas de control mental».
Otra de las víctimas, Ashley Walters, asegura que sigue sufriendo de trastorno de estrés postraumático y depresión. «Me mantuve en contacto con bastantes personas que pasaron por sus propios traumas, bajo su control. Mientras todos luchábamos, como lo hacen los sobrevivientes, por seguir adelante con nuestras vidas, seguía escuchando historias inquietantemente similares a mis propias experiencias. No puedo quedarme al margen y dejar que esto le suceda a otros. Brian Warner debe rendir cuentas».
El testimonio de otra de estas mujeres, Sarah McNeilly, es espeluznante: «He tenido miedo de atraer la atención sobre mí para evitar terminar en su punto de mira de nuevo. Como resultado de la forma en que me trató, sufro problemas de salud mental y trastorno de estrés postraumático que han afectado a mis relaciones personales y profesionales, mi autoestima y mis metas personales. Creo que le gusta arruinar la vida de la gente. Quiero que Brian rinda cuentas por su maldad».
En mayo de 2018, pocos meses después de que el movimiento #MeToo comenzara a tener impacto en la industria del entretenimiento, The Hollywood Reporter informó de que se había presentado un informe policial contra Manson citando delitos sexuales no especificados, que supuestamente tuvieron lugar en 2011. En agosto de 2018, la Fiscalía de Distrito de Los Ángeles anunció que se negaba a continuar con el caso debido a la falta de pruebas. El abogado de Manson, Howard E. King, respondió a las acusaciones diciendo que fueron «categóricamente negadas por el Sr. Warner» y calificándolas de «completamente delirantes».
De la automutilación al abuso
La primera novia conocida de Marilyn Manson, a principios de los noventa, fue la actriz Rose McGowan, con quien estuvo cinco años. Después se emparejó con la actriz de burlesque Dita Von Teese, con quien estuvo cinco años de novio, antes de casarse en 2005 en un castillo de Irlanda con Alejandro Jodorowsky como maestro de ceremonias.
Cuando se divorciaron un año después «por diferencias irreconciliables» (según ella), Manson cayó en una tremenda depresión que le llevó a automutilarse. «Mi momento más bajo fue la pasada Navidad, porque no hablaba con nadie de mi familia», confesaba en una entrevista de 2008. «Lo pasé mal al estar solo, sentirme olvidado y traicionado por poner toda mi confianza en una persona, y cometer el error de que era la persona errónea. Cada vez que la llamé ese día -llamé 158 veces-, agarraba una cuchilla y me cortaba la cara o mis manos. Ahora tengo fantasías cada día acerca de romperle su cráneo con un mazo».
Fue justo en esa época cuando empezó a salir con Evan Rachel Wood. También salió con varias estrellas del cine porno, como Traci Lords, Jenna Jameson y Stoya, y ahora lleva diez años con la fotógrafa Lindsay Usich, con quien se casó en 2020. (Fuente: abc.es)