CHETUMAL, MX.- Carniceros de esta ciudad han perdido al menos la mitad de sus ventas a restaurantes, debido a la creciente preponderancia del gigante Kekén, a quien acusan de prácticas monopólicas, pues les vende caro el producto a ellos, pero lo ofrecen barato al público a través de sus tiendas Maxicarnes.
Jahir Martínez, señaló que la situación ya se ha normalizado un poco después de lo más álgido de la pandemia y de la Cuaresma; sin embargo, un sector que parece que ya no se recuperó es el de entregas (a comercios), pues los han perdido a Kekén.
Recordó que el año pasado, al cerrar los restaurantes, se cayeron sus ventas de entregas, pero esto no significó en una pérdida para ellos, pues la ciudadanía comenzó a comprar más carne, al ya no poder comer afuera.
“Los dos puercos que vendías a restaurantes, ahora la gente venía a consumirlos”, recordó.
Ahora ya se reabrió el comercio y volvieron a estar como antes, solo que muchos restaurantes ya se proveen directamente con Kekén y ya no con ellos.
“Hay prácticas monopólicas de este distribuidor, porque nos venden caro el producto, pero ellos lo ofrecen barato (en Maxicarne)”, señaló.
En tan solo 20 días, el precio del kilo de cerdo aumentó de 80 a 100 pesos, aunque en esta cadena de carnicerías, sigue sin cambios.
“Desde que se formó Keken fue que comenzó la prohibición de la venta de cerdos de patio, porque supuestamente contaminaba. Al ya no poder comprar carne a los ciudadanos, ya no nos queda otra opción que ir con esta empresa, que debe decirse, no es yucateca”, dijo.
En efecto, aunque la planta procesadora está en Yucatán, Kekén pertenece al Grupo Kuo, conglomerado mexicano con presencia en 70 países y oficinas centrales en la Ciudad de México. (Agencia SIM)