ESTADOS UNIDOS.- Un hombre acusado de perpetrar sangrientos homicidios en Los Ángeles y que fue etiquetado como “el asesino de la casa de al lado” por atacar a mujeres en sus propias casas, fue sentenciado con la pena de muerte, publicó La Opinión con información de The Associated Press.
Tras dos años de postergaciones de la sentencia por la pandemia y otras razones, el juez Larry P. Fidler dio su veredicto en contra de Michael Thomas Gargiulo, de 45 años de edad, cuyo juicio alcanzó mayor dramatismo y atención al conocerse que una de sus víctimas iba a tener una cita con el actor Ashton Kutcher, quien incluso fue uno de los testigos en el juicio.
El sentenciado fue encontrado culpable por la muerte de Ashley Ellerin, de 22 años, en su casa de Hollywood en 2001 cuando la estudiante de diseño se preparaba para una cita con Kutcher. Éste llegó tarde a recogerla y ella nunca contestó a la puerta. Ellerin había sido apuñalada cruelmente con 47 heridas de cuchillo.
Gargiulo también fue acusado de asesinar a María Bruno, de 32 años, en su casa de El Monte en 2005. En la terrorífica escena del crimen, ella fue encontrada con los senos cortados y los implantes extraídos.
Está por verse si el acusado al final es ejecutado, algo que no ha sucedido en California desde 2006. En diciembre pasado, el nuevo fiscal de Los Ángeles, George Gascón, afirmó que nadie más será condenado a muerte en el condado.
La tercera víctima del asesino en el sur de California fue Michelle Murphy, de 26 años, quien sobrevivió al defenderse en su apartamento de Santa Mónica en 2008. Fue ese incidente el que resultó clave para el arresto del asesino, indicó AP, pues los investigadores descubrieron sangre suya que luego relacionaron con los dos asesinatos.
El asesino hoy sentenciado había cometido su primer homicidio en 1993 en Chicago, de donde él es originario, al matar a Tricia Pacaccio, de 18 años.
Gargiulo, quien quiso dedicarse a la actuación y que trabajó como reparador de aires acondicionados, no tuvo reacción este viernes al escuchar la sentencia del juez, según el reporte de AP, pero se quejó de que sus abogados no le permitieron subir a la silla de los testigos. (Fuente: La Opinión)