Por Rafael Briceño
CHETUMAL, MX.– Como un triunfo para la libertad de expresión, calificó Emiliano Ramos Hernández, la sentencia de los magistrados de la Sala Regional Xalapa que dejaron sin efecto la queja interpuesta por el gobernador Carlos Joaquín González contra el partido Morena, sus dirigentes Mario Delgado y Citlali Hernández y la ex candidata a la presidencia municipal de Solidaridad, Laura Beristain Navarrete “ya que hubiera sentado un mal precedente que se hubiera considerado calumnia electoral el haber señalado al gobernante de haber intervenido en la elección”.
“Una sentencia contraria a la aprobada por los magistrados hubiera permitido que cualquier gobernador sensible a la crítica, a los señalamientos, estaría acusando a los opositores y a medios de comunicación”, dijo.
Manifestó que los pronunciamientos hechos no fueron calumnias, ya que el gobernador no fue candidato y formaron parte del debate democrático.
Quien ocupa un cargo público debe entender que siempre será objeto de señalamientos pero es parte de la labor del servidor público, agregó.
Ramos Hernández consideró que esta administración estatal terminará con mayor saldo negativo que positivos, sin cosas de que presumir “y esa intolerancia a la crítica marcará este sexenio”.
Consideró que el gobernador debe atender los problemas y rezagos que no se han podido atender y no intervenir en el próximo proceso electoral ya que serán los ciudadanos que definan el rumbo de Quintana Roo “y todos sabemos que Morena encabeza todas las encuestas”.
Afirmó que esta administración es un sexenio perdido. Hubo quienes lo apoyamos buscando un cambio que nos distanciamos porque nos dimos cuenta que no se iba a cumplir con el cambio Progresistas. (Noticaribe)
