CAMPECHE, MX.- Una prematura recién nacida falleció por presunta negligencia médica en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales del Hospital General de Zona (HGZ) No. 1 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), donde aparentemente resultó infectada de VIH, publicó Proceso.
Clarisa Duarte Loeza, madre de la pequeña, denunció que la muerte de su hija, ocurrida la madrugada del domingo 31 de octubre, es el fatídico desenlace de una cadena de anomalías en que el personal del nosocomio incurrió durante los tres meses que la niña estuvo hospitalizada desde su nacimiento prematuro.
Expuso que en el certificado de defunción se anotó como causa de la muerte “shock séptico”, pero en su expediente clínico, donde se mencionan entre otros padecimientos que la menor sufría anemia aguda, el personal del hospital evitó mencionar el VIH, que le habrían transmitido ahí.
“Murió a las 5 de la mañana. Es una injusticia… desde el área de administración hasta pediatría estuvimos peleando para que le cambiaran el catéter descontinuado que tenía puesto la niña y le dieran un tratamiento adecuado para el VIH, que contrajo en el mismo hospital y el cual no apareció en el acta de defunción, pues desde el director hasta el subdirector, se están echando la bolita”, lamentó.
Resaltó que por cuenta propia tuvo que contratar los servicios particulares de un infectólogo pediatra pues el hospital le ocultó que los estudios que se le practicaron a la pequeña arrojaron que estaba infectada de VIH.
Aclaró que tanto ella como el padre de la niña, así como la gemela de la bebé, se hicieron las pruebas de VIH y en los tres casos resultaron negativas por lo que la única explicación que queda sobre la manera como se pudo haber infectado es que el virus se le transmitió en el hospital luego de su nacimiento.
Acusó que el personal médico se negó a dar tratamiento para el VIH a la pequeña porque estaban en espera de los resultados de un segundo análisis para confirmar el contagio.
Mientras tanto, añadió, el viernes 28 de octubre, cuando los médicos intentaban suministrarle un medicamento a la bebé, que permanecía en una incubadora, la manguera reventó debido a las malas condiciones en que estaba el catéter, además de que el instrumento estaba obstruido.
Dadas las circunstancias exigió a las autoridades investigar el caso de su pequeña y sancionar a los responsables de la serie de negligencias que derivaron en su fallecimiento.
Al respecto, la delegación estatal del IMSS emitió una tarjeta informativa, la No. 0709/2021, para dar a conocer su versión del caso.
La institución lamentó “profundamente la evolución de la derechohabiente recién nacida que concretó una estancia de 98 días a cargo del equipo médico multidisciplinario en el Hospital General de Zona (HGZ) No. 1 ‘Dr. Abraham Azar Farah’”, de esta capital.
Explicó que “desde su nacimiento gemelar recibió atención médica especializada por tres meses en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales, de acuerdo con los requerimientos del caso” y añadió que “la paciente nació vía cesárea a las 33 semanas de gestación y con peso de 850 gramos”.
Reconoció que “dentro de los múltiples estudios aplicados, se determinó una prueba ELISA para VIH con resultado positivo”, pero argumentó que este resultado no es definitivo “debido a las condiciones de inmadurez, por el retraso propio observado en su crecimiento e infecciones asociadas”.
Agregó que “para corroborar el diagnóstico, se extrajo muestra para una prueba confirmatoria Western-Blot” cuyos resultados están por recibir.
Explicó que, según la Norma Oficial, “en todos los pacientes con ELISA positiva se realiza la prueba confirmatoria, que es la que determina el resultado final y este se registra a una base de datos que no puede modificarse”.
Aseguró que personal de Atención y Orientación al Derechohabiente y de Trabajo Social, en cumplimiento con el procedimiento normado para estos casos, acompaña a familiares en las acciones subsecuentes. (Fuente: Proceso)