MÉRIDA, MX.- Al darse a conocer hace unos días la primera guía multimedia de turismo biocultural de México, cuatro experiencias que se ofrecen en Yucatán fueron tomadas en cuenta por su originalidad, cuidado de sus raíces y ser generadores de una actividad turística sustentable.
“Sabemos que Yucatán es un destino inacabable y promotor del turismo biocultural. Estamos seguros que son y serán protagonistas”, destacó Alonso Vera, líder de opinión turística, viajero por afición, productor y conductor, entre otras tantas aficiones.
Mejor conocido como “Pata de Perro”, tuvo la iniciativa de generar esta guía, luego de tres años de investigación, en los que visitó los 32 estados y documentó cerca de 500 experiencias de vida, para crear contenidos editoriales fotográficos y audiovisuales, en la voz de los protagonistas.
“Quisimos destacar cuatro experiencias yucatecas, que tienen todos los componentes a presumir acerca de lo que hace de México, un destino que vale la pena visitar”, señaló.
Izamal, primer Pueblo Mágico de México, poseedor de rica historia y una belleza sinigual, además de una deliciosa gastronomía, quedo en la categoría de “Manos mágicas de los maestros del arte popular”. Cuenta con talleres abiertos al público, a cargo de los maestros Gabriel Pérez Casanova, tallador de madera, y Esteban Abán Montejo, quien trabaja con espina del henequén y el cocoyol.
Maní, uno de los cuatro Pueblos Mágicos de Yucatán, que recientemente obtuvo el nombramiento como Best Toursim Village de parte de la Organización Mundial del Turismo (OMT), aparece en esta guía en la categoría “Viajes que marcan el futuro”.
“Maní tiene todo para atraer turismo de exportación para capitalizar el trabajo hecho en la restauración del convento, para destacar a los meliponarios, la historia, el origen del poc chuc, la posibilidad de encontrarse con la comunidad maya viva que es muy auténtica y la cercanía con zonas arqueológicas y otras experiencias, hacen excepcional este destino”, abundó.
En la misma categoría está “Pasar la noche en una hacienda para beneficiar a su comunidad”. Surgidas en una época emblemática para la Península, implicó un esfuerzo restaurarlas y acondicionarlas como hoteles de lujo, representado de una manera diferente, e impacta a las comunidades, que provee productos e insumos. La Hacienda Santa Rosa de Lima y la Ruta Puuc, son un ejemplo de esto.
Por último, está la categoría “Experiencias que no tienen precio”, en la que sobresale bucear en un cenote con el Arqueólogo Guillermo de Anda.
“Considerados como puerta de entrada a la cosmovisión maya, los cenotes son reservas de agua que dan vida a los ecosistemas maravillosos de la Península. Al visitarlo, facilita la conservación a través de la derrama económica y también hacer conciencia de los tesoros que resguardan, hay todo un mundo arqueológico y paleontológico inimaginable”, añadió “Pata de Perro”. (Infoqroo)