TULUM, MX.- Delegados e integrantes de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) protagonizaron una manifestación afuera del hotel Copal de esta ciudad, en representación de los trabajadores que estaban en su interior, pues alegan que les violan sus derechos.
Unas cinco personas, incluida el delegado croquista de Tulum, se tomaban turnos con un megáfono para pararse frente a la entrada del hotel y lanzar mensajes en apoyo a los trabajadores al interior, en español y en maya, rogándoles no firmar ningún documento.
“No firmen nada, aquí estamos afuera compañeros”, declaraba un croquista frente a la fachada del hotel, sin ningún tipo de reacción visible.
La movilización en este hotel, ubicado en la avenida Juárez de esta cabecera municipal, se originó por el despido de un trabajador, identificado solo como Pedro, en violación al acuerdo llegado apenas la semana pasada, en el que la empresa se comprometió a no tomar represalias.
El conflicto original data de un mes, pues los trabajadores se inconformaron por la comida que les servían, en mal estado, además de malos tratos por parte de sus jefes directos, incluida a la ama de llaves, Amelia, quien les tiene prohibido hablar en maya.
Pedro, presente en la protesta, señaló que desde esa inconformidad, ya han despedido de manera injustificada a 10 personas, incluido a dos de los representantes sindicales, a quienes encierran en una habitación, sin poder salir hasta que firmen su baja “voluntaria”.
La comida que servían en el comedor ha ido mejorando poco a poco, aceptó, pero los malos tratos continúan, además de otras irregularidades, como falta de pago a sus horas extra.
Además, todos deben llevar su propio traste para recibir la comida, de lo contrario se quedan sin comer. A las camaristas les exigen llevar sus propios implementos de limpieza, como fibras, escobas, trapeadores y más, pese a que es obligación del hotel contar con estas herramientas.
Ya se quejaron con la Procuraduría en Defensa del Trabajador, quien envió a un inspector para verificar el hotel, pero al que se le negó el acceso, por estar el lugar en malas condiciones.
Los inconformes mantuvieron una mesa instalada afuera del hotel, en espera de ser atendidos por la gerencia. (Agencia SIM)