CIUDAD DE MÉXICO, MX.- El próximo 31 de enero organizaciones sindicales y sociales realizarán una manifestación, -tanto presencial como virtual- en demanda de la instalación de una mesa de diálogo con las autoridades del gobierno federal, publicó El Economista.
Así lo anunciaron los representantes de la Unión Nacional de los Trabajadores, (UNT), el Frente Amplio Social Unitario (FASU), el Encuentro Nacional de Dirigentes (ENADI), quienes detallaron que la jornada nacional de lucha incluirá mítines representativos ante el Senado de la República y en las principales plazas públicas del país, además de la trasmisión de estos eventos por redes sociales.
Durante la emergencia sanitaria, destacaron, se han recrudecido las presiones para que los trabajadores acepten recortes a sus derechos y puestos de trabajo como se demuestra en el caso del Sindicato de Telefonistas, de los trabajadores de los organismos públicos descentralizados, de los sectores del aerotransporte, la cultura, la educación y la energía, entre otros.
Asimismo, hicieron un llamado a las autoridades laborales a establecer las condiciones para garantizar que la actual etapa de la reforma constitucional en materia de justicia laboral, cuyo núcleo central es la legitimación de los contratos de trabajo, se lleve a cabo con total apego a los principios de legalidad, transparencia y respeto a la libertad de asociación sindical que estipula la ley reglamentaria de la misma, “evitando en todo momento la injerencia indebida de los patrones y ciertos actores políticos que solo buscan socavar, dividir y someter a los trabajadores para su propio beneficio”.
Francisco Hernández Juárez, presidente colegiado de la UNT, destacó que ”vamos a salir a expresar nuestras preocupaciones por el tono que están teniendo algunos aspectos laborales, por nuestra propuesta que desde todos estos años hemos venido impulsando por el cambio de rumbo económico y social de este país”.
Añadió que este momento es una oportunidad con este nuevo gobierno “que sacó desde el poder a las mafias que se habían mantenido durante muchos años, pero que, si no logramos como sociedad hacernos valer en cuanto al rumbo que debe ir el país, el gobierno no creo que solo pueda consolidar el proceso de cambio que está en marcha. Así que, pues nos ha costado trabajo hacernos notar nuestra opinión frente al gobierno, pero pues se nos tome o no tomar en cuenta, nosotros tenemos que seguir luchando”. (Fuente: El Economista)