CIUDAD DE MÉXICO, MX.- El expresidente Ernesto Zedillo Ponce de León lamentó que América Latina sufra una “ola de gobernantes populistas e ineptos” que convirtieron la gestión de la pandemia en un “desastre”, publicó SinEmbargo.
“Esperemos que la ola de gobernantes populistas e ineptos que están sufriendo un buen número de países latinoamericanos sea seguida de liderazgos decididos y capaces de hacer lo necesario para que nuestras naciones se encausen firmemente en el camino del desarrollo”, expresó el exmandatario mexicano durante la conferencia digital “Perspectivas económicas y el futuro de la tecnología en Latinoamérica”.
Quien fuera Presidente de México de 1994 a 2000 enfatizó en “la deficiente manera” en que se enfrentó la emergencia de COVID. “No es sorprendente que los países latinoamericanos hayan figurado entre los que tuvieron los peores índices de morbilidad y mortalidad en 2020”.
El también director del Centro para el Estudio de la Globalización en la Universidad de Yale criticó la decisión de algunos países latinoamericanos de “detener y revertir reformas ya adoptadas en el pasado y que mucha falta harán para favorecer el desarrollo de nuestros países”.
Las reformas “siempre han enfrentado por un lado una resistencia significativa por quienes han logrado capturar y concentrar el poder económico y político”, dijo.
“La causa del pobre desempeño de las economías latinoamericanas en años recientes no se encuentra en las reformas de fines del Siglo XX y principios del siglo XXI. En realidad el problema con nuestros países no es que tuvieran reformas, el problema es que nunca fueron los suficientemente completas en sus objetivos ni en su ejecución”, expuso.
“En algunos de nuestros países se ha procedido con una gradualidad extrema para eliminar los obstáculos estructurales que impiden un rápido crecimiento; mientras que en otros, incluso, se ha optado por detener y revertir reformas ya adoptadas en el pasado y que faltarán para favorecer el desarrollo de nuestros países”, añadió el expresidente Zedillo.
Sustituto del candidato asesinado Luis Donaldo Colosio y cercano al Presidente saliente Carlos Salinas de Gortari, el economista Ernesto Zedillo Ponce de León gobernó al país de 1994 al 2000, periodo marcado por el Fobaproa, la matanza de Acteal y Aguas Blancas en el sureste, además de la privatización del sistema ferroviario.
El político priista no tiene redes sociales. Su última aparición pública fue este jueves y sólo cuestionó a los gobiernos de América Latina, aunque durante su gestión en los noventa, el país también enfrentó una crisis económica histórica y un aumento de la pobreza, sobre todo en Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Puebla y Veracruz, acompañado incluso de suicidios.
El denominado “Efecto Tequila” se sembró el 20 de noviembre de 1994. Tras el levantamiento zapatista y el asesinato de Colosio, el aún Presidente Carlos Salinas y su equipo económico conformado por Ernesto Zedillo y Pedro Aspe decidieron posponer la devaluación de la moneda mexicana.
Hasta el 19 de diciembre, a días de que tomó protesta en la Cámara de Diputados, Zedillo ajustó el tipo de cambio y el peso se devaluó más del 50 por ciento. Se perdieron un millón y medio de empleos ante la quiebra de las empresas, y los ciudadanos no podían pagar los créditos.
En enero de 1995, Zedillo anunció que había logrado un respaldo financiero con el Presidente de Estados Unidos, Bill Clinton. Además, el Fondo Monetario Internacional (FMI) otorgó un préstamo de más de 20 mil millones de dólares. Pese a ello, quebraron los bancos y miles de empresas, por lo que para rescatarlas se creó el Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa).
Es decir, pese a diversas manifestaciones ciudadanas en las calles, las pérdidas de unos cuantos se socializaron y la deuda privada se volvió pública. (Fuente: SinEmbargo)