Por Itzel Chan
MÉRIDA, MX.- Con el fin de dar a conocer un panorama más cercano a la realidad, en el marco de la Feria Internacional de la Lectura Yucatán (Filey), fue presentado el Atlas Geográfico y Estadístico para el análisis del Suicidio en la Península de Yucatán, documento en el cual se muestran diversos factores que influyen en esta problemática social.
La doctora Laura Hernández Ruiz, del Centro Peninsular en Humanidades y Ciencias Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), explicó que gran parte de los datos reunidos fueron extraídos de las publicaciones de medios de comunicación, ya que en conjunto con datos obtenidos de estadísticas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) permiten ampliar la información.
“La razón por la que tomamos información de los medios de comunicación es porque es lo que les llega a las personas y porque en los medios encontramos datos para conocer contextos, localidades, situación socioeconómica, detonadores y otros datos”, indicó.
Describió que este documento tiene diversos mapas generales de la situación de la Península de Yucatán y otros específicos de cada estado que la componen, es decir, Campeche, Quintana Roo y Yucatán.
Algunos mapas están relacionados con factores como la pobreza, crecimiento poblacional y dinámica de suicidios desde 2010.
La investigadora explicó que el suicidio es una muerte que resulta directa o indirectamente por hechos cometidos por la víctima misma y hay comunidades mayas en las que consideran estos sucesos como parte de una epidemia.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) cada año se suicidan más de 800 mil personas y calcula que es la segunda causa de muerte entre el grupo etario entre 15 a 29 años.
Sin embargo, en Yucatán, desde 2010, el grupo etario que presenta mayo índice de suicidios es de 25 a 29 años, seguido del de 20 a 24 y luego del de 30 a 34 años.
“Es decir, se trata de las personas en una etapa productiva en la que se espera una independencia económica y logros personales, familiares, de trabajo y otros”, indicó la investigadora.
Incluso identificaron que en la etapa de 25 a 29 años, los suicidios se han elevado en un 350 por ciento y en rangos de edades entre los 40 a 44, 50 a 54 y 65 a 69, se trata de un 400 por ciento más.
En la relación hombres-mujeres, Hernández Ruiz dijo que las personas del sexo masculino son quienes usan métodos más contundentes, por lo tanto, hubo un aumento en Yucatán, ya que por ejemplo, en 2010 fueron 172 personas las que se suicidaron y para 2020 esta cifra ascendió a 186.
Para el mismo periodo, en 2010, fueron 37 mujeres las que lo hicieron y para 2020 se trató de 60.
Sin embargo, algo que rescata es que a nivel nacional el crecimiento población registró un 12 por ciento y el índice de suicidios fue de 57 y en el caso de Yucatán, el crecimiento poblacional fue de 18 por ciento y el de suicidios de 17 por ciento, es decir, un porcentaje menor al del país.
“Algo se está haciendo bien en el estado. Hay muchas organizaciones trabajando a nivel escolar y hay muchas dependencias trabajando en el tema de salud”, manifestó.
Algunos otros aspectos que se abordan en el documento es la comprobación de que no hay una relación directa entre el número de población y el índice de suicidios como se ha creído en algunos sectores.
En el caso de Campeche, el municipio que más presenta suicidios es Ciudad del Carmen; en Quintana Roo, Othón P. Blanco y Benito Juárez y en Yucatán, Mérida y Tizimín.
Algunos factores que influyen en las estadísticas de suicidio en la Península de Yucatán, de acuerdo con la investigadora, tienen que ver con cambios regionales, aumento de la actividad turística, desplazamiento de sectores productivos, crecimiento demográfico, insuficiente dotación de servicios públicos, desempleo, desigualdades sociales, incremento de la delincuencia, alcoholismo, consumo de drogas, prostitución, violencia de género y otras problemáticas.
Durante la presentación de este documento, La doctora Laura Hernández pidió a los medios de comunicación ser responsables y por ejemplo, al dar a conocer un hecho de suicidio, que no se brinden mayores detalles que puedan incidir en la decisión de alguien con riesgo suicida. (Noticaribe)