Por Rafael Briceño
CHETUMAL, MX. Tras manifestar que la administración estatal y la Décimo Sexta legislatura propusieron y aprobaron iniciativas con el único afán recaudatorio y para sangrar a quienes contribuyen con la generación de empleos y la economía de la zona sur, el presidente de la Unión de Restaurantes, Bares y Similares, Joaquín Noh Mayo, hizo un llamado a los candidatos y candidatas a la gubernatura del Estado y a las diputaciones locales para considerar una modificación a la ley de alcoholes que permita una recuperación económica real.
La ley de alcoholes tuvo varias modificaciones y adiciones de artículos, pero dicho con todo respeto no abonaron en nada y únicamente tuvieron un afán recaudatorio lo que se refleja con el aumento de entre el 200 y hasta el 300 por ciento en el monto de los costos de resello y comodatos, señaló.
Entre las propuestas a quienes aspiran a la gubernatura y a integrar la próxima legislatura, Noh Mayo dijo que es necesario retomar la distancia de 200 metros para permitir la instalación de establecimientos para la venta de bebidas alcohólicas en envase cerrado o bares y restaurantes “y que, con los 500 metros establecidos en estos momentos, es prácticamente imposible no encontrarte con alguna escuela, iglesia, un parque o una dependencia gubernamental”.
Dijo que en esta administración, de manera paulatina, hubo un aumento de entre el 200 y 300 por ciento en el costo de resello de patentes y de comodatos, que se hizo prácticamente impagables y afectó la economía de los empresarios y propietarios de establecimientos.
Noh Mayo dijo que la restricción en los horarios de ventas de bebidas alcohólicas únicamente aumentó los actos de corrupción y el clandestinaje “si bien la intención era evitar el alcoholismo, drogadicción y la inseguridad, lo cual simplemente no funcionó”.
Propuso que se regrese a los horarios establecidos con anterioridad, ya que las horas extraordinarias son demasiado caras, a mayor restricción mayor corrupción, ya que muchos lo pagan, pero esos recursos no ingresan a las arcas estatales.
Asimismo, propuso que sean los ayuntamientos los que se encarguen de regular el funcionamiento de los bares y restaurantes, “no se trata de sangrar a quienes generan empleos y contribuyen con la actividad económica”. (Noticaribe)