Por Rafael Briceño
CHETUMAL, MX. – Ante la insistencia de los campesinos de los municipios de Othón P. Blanco y Bacalar y el amago de recurrir a medidas más drásticas en caso de no ser escuchados, el gobierno del Estado accedió a utilizar unos 500 millones de pesos que tenía guardado del extinto Fondo Nacional de Desastres Nacionales (Fonden) para iniciar, en un plazo de 45 días, trabajos de rehabilitación de los caminos rurales que presenten mayores daños y terminar antes que concluya la administración estatal.
Al concluir una tercera reunión en la que estuvo el secretario de obras públicas, William Conrado Alarcón; el subsecretario de enlace interinstitucional, Miguel Paniagua Lara y la representación de la Secretaría de Finanzas y Planeación y de la SCT, Ramón Raza Trigueros, presidente de la Unión de Ejidos del Sur, organismo integrado a la Coordinadora de Autoridades Ejidal es y Municipales de Quintana Roo, dijo que será una manita de gato para atenuar el severo problema que presentan las carreteras rurales de los municipios de Othón P. Blanco y Bacalar, luego de mucho batallar por tener una respuesta.
Explicó que los funcionarios estatales insistieron en que no había recursos y que las obras ya estaban programadas.
Sin embargo, ante los señalamientos que no estaban dispuestos a ceder y que estaban dispuestos a tomar otras medidas, el subsecretario de gobierno reconoció que disponían de 500 millones de pesos del Fonden que no fueron utilizados en la reparación de las carreteras afectadas por las inundaciones del 2020 y que podrían ser utilizados para atender la petición de los ejidatarios.
El Fonden desapareció pero quedó ese remanente y nos dijeron que pueden sacarlo con otro argumento para reparar carreteras y darles su manita de gato a los tramos más afectados.
Raza Trigueros dijo que el domingo tendrán una reunión en la comunidad de David Gustavo en donde definirán cuáles son los tramos más afectados y se entregará la propuesta a la Secretaría de Obras Públicas para que inicien los trabajos de reparación en un plazo de 45 días y con el compromiso de concluir antes de septiembre cuando termina la administración estatal.
En caso que las obras no se terminen en este sexenio vamos a pedirles que por lo menos las dejen pagadas al cien por ciento y se continúe trabajando.
Afirmó que no están dispuestos a recibir otra respuesta negativa “aunque el compromiso es un mejoral para atender el daño que presentan las carreteras rurales”.
Incluso, la SCT se comprometió a que si hay recursos federales de esta administración se harán la gestiones para que se atiendan las carreteras rurales. (Noticaribe)