CIUDAD DE MÉXICO, MX.- México se ubica en el sexto lugar en América Latina en cuanto a fumadores adultos, con un 13.1 por ciento de su población total, publicó Milenio.
Además, ocupa el tercer sitio con el mayor número de adolescentes expuestos al cigarro o derivados electrónicos a pesar de que ha aplicado estrictas medidas contra las tabacaleras, de acuerdo con el Nuevo reporte de Control del Tabaco en La Región de las Américas 2022, de la Organización Panamericana de la Salud.
El primer lugar entre adultos lo ocupa Chile con 29.2 por ciento de su población fumadora; Argentina 24.5 por ciento; Estados Unidos 23 por ciento; Uruguay 21.5 por ciento; Cuba 17.9 por ciento.
La media en la región es de 16.3 por ciento y el país con menor tasa de adicción al tabaco es Panamá con 5 por ciento.
En cuanto a la prevalencia de consumo actual de tabaco entre población adolescente (de 13 a 15 años) que consumía un tabaco con o sin humo, al menos una vez en los 30 días anteriores a la encuesta, en todos los países (excepto Brasil, Canadá, Chile, Colombia y Estados Unidos) presentan una tendencia a la alza.
El país se ubica con un 19.8 por ciento de menores de edad. Conforme con las estadísticas, República Dominicana, Argentina y México, en ese orden, tiene adolescentes que fuman o han fumado, de acuerdo con el Informe de la OMS sobre la epidemia mundial de tabaquismo 2021 donde se aclaró que las autoridades sanitarias aún no han actualizado las estadísticas de sexenios pasados en este sector por lo que se tomaron las que se tienen.
“La prevalencia del consumo actual de tabaco se refiere al porcentaje de la población adulta (personas de 15 años o más) que consumía un producto de tabaco (ahumado y sin humo) en los 30 días anteriores a la encuesta; incluye tanto el uso diario como el ocasional”.
No obstante, México, de acuerdo con el informe, reportó que con excepción de los impuestos, cuatro de las seis medidas recomendadas han sido implementadas para reducir el tabaquismo, causante de enfermedades crónicas y muertes prematuras, entre estas, etiquetado de advertencia, lugares 100 por ciento libres de humo; prohibición de publicidad, y acceso a terapias.
Sólo seis estados miembros, Brasil, Canadá, El Salvador, Jamaica, México y Estados Unidos han establecido llamadas nacionales gratuitas a líneas telefónicas para dejar de fumar, terapia de reemplazo de nicotina accesible, y servicios de apoyo para dejar de fumar ofrecidos a la población, lo que les permite implementar medidas relacionadas con ofrecer ayuda para dejar el tabaco en el nivel más alto de aplicación.
Hay 22 países que ahora están implementando medidas para advertir sobre los peligros del tabaco a través de advertencias sanitarias gráficas en el embalaje de productos de tabaco, después de que los Estados Unidos, Antigua y Barbuda (2018), Venezuela (2019), y México (2021) ahora tienen prohibiciones completas sobre la publicidad, promoción y patrocinio de productos de tabaco (TAPS).
Esto eleva el total a nueve países en la Región de las Américas que implementan medidas al más alto nivel del Convenio para el Control del Tabaco (CMCT de la OMS).
Sólo tres países están implementando medidas garantizar que el umbral de impuestos indirectos totales representa el 75 por ciento o más del precio de venta al público de productos de tabaco. Se trata de Argentina (76.6 por ciento), Brasil y Chile (los están por arriba por 81.5 y 80 por ciento).
México con 67.6 por ciento, un incremento estabilizado desde 2021, por debajo de Ecuador (66.0 por ciento), Nicaragua (69.4 por ciento), Perú (67.7 por ciento) y Venezuela (73.4 por ciento).
Los progresos no han sido uniformes sobre el control del tabaco para la Región de las Américas 2022 de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), presentado hoy, donde 26 de los 35 países de la región, han alcanzado el máximo nivel de aplicación de al menos una medida.
“El tabaco causa casi un millón de muertes anuales en la región y es el único producto de consumo legal que mata hasta a la mitad de los que lo consumen”, afirmó Anselm Hennis, director del Departamento de Enfermedades no Transmisibles y Salud Mental de la OPS.
“Ante esta enorme amenaza, la respuesta debe ser igualmente agresiva. Las medidas de control funcionan y debemos avanzar más rápidamente en la aplicación de todas ellas”.
Así, el reporte muestra que, en 2021, de 35 países de las Américas:
- 24 aplican medidas para proteger de la exposición al humo de tabaco ajeno.
- 2 utilizan advertencias gráficas grandes sobre los peligros de fumar en los paquetes de productos de tabaco.
- 10 disponen de sistemas de vigilancia con datos recientes, periódicos y representativos del consumo de tabaco en adultos y jóvenes.
- 6 países ofrecen ayuda integral para dejar de fumar.
- 9 establecen prohibiciones totales sobre la publicidad, promoción y patrocinio.
- 3 países aplican impuestos indirectos a los cigarrillos que representan el 75 por ciento o más de su precio de venta minorista.
Los avances en la aplicación de estas seis medidas, conocidas como MPOWER y establecidas por la OMS en 2008, han contribuido a reducir los consumidores, que pasaron de representar el 28 por ciento de la población de la región en 2000 al 16.3 por ciento en 2020, la segunda prevalencia más baja del mundo.
Además, en 2020 Sudamérica se convirtió en la primera subregión libre de humo de las Américas, es decir, donde está absolutamente prohibido fumar en lugares públicos y de trabajo cerrados y en el transporte público.
El consumo de tabaco es el principal factor de riesgo para seis de las ocho principales causas de muerte en el mundo, así como para las cuatro enfermedades no transmisibles más prevenibles y prevalentes: cardiovasculares, diabetes, cáncer y respiratorias crónicas.
Todas las formas de tabaco son perjudiciales y no existe un nivel seguro de exposición.
Hacer frente a la amenaza de los nuevos productos
El informe de la OPS advierte que los productos de nicotina y tabaco novedosos y emergentes, como los cigarrillos electrónicos, están cada vez más disponibles y accesibles, lo que supone una amenaza para el control del tabaco.
Asimismo, alerta que la industria del tabaco emplea afirmaciones engañosas para ganar consumidores y nuevos mercados.
La OPS/OMS recomendó a los gobiernos que pongan en marcha reglamentaciones para evitar que los no fumadores empiecen a consumir estos productos, impedir que el consumo de tabaco vuelva a normalizarse en la sociedad y proteger a las generaciones futuras.
Actualmente, la venta de sistemas electrónicos de administración de nicotina está prohibida en siete países de las Américas. Cinco de ellos y otros 13 han adoptado alguna medida parcial para prohibir su uso, limitar su publicidad, promoción y patrocinio o exigir advertencias en su empaquetado. Quince no imponen ningún tipo de marco regulador. (Fuente: Milenio)