Jesús Murillo Karam fue trasladado al Reclusorio Norte donde se realizará su audiencia inicial tras su detención el día de ayer.
Por lo que se prevé que la audiencia inicial comience a las 9 de la mañana de hoy.
Es el autor de “La verdad histórica” sobre la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa
Jesús Murillo Karam fue trasladado al Reclusorio Norte donde se realizará su audiencia inicial tras su detención el día de ayer.
Por lo que se prevé que la audiencia inicial comience a las 9 de la mañana de hoy.
Murillo Karam fue procurador durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, fue detenido cuando salía de su casa en las Lomas de Chapultepec, por los delitos de desaparición forzada, tortura y contra la administración de justicia, en el caso Ayotzinapa.
En el operativo participó personal de la Secretaría de Marina-Armada de México.
El detenido colaboró con las autoridades sin oponer resistencia. Fue traslado a las instalaciones de la Fiscalía para las certificaciones correspondientes y enseguida será puesto a disposición de la autoridad judicial.
El exfuncionario fue trasladado al Reclusorio Norte, pero su audiencia no se realizó ayerviernes.
Es el autor de “La verdad histórica” sobre la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.
El jueves, la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del caso Iguala concluyó que los 43 normalistas de Ayotzinapa fueron asesinados y posteriormente desaparecidos.
Las autoridades determinaron que el caso fue un “crimen de Estado” en el que estuvieron involucrados autoridades de todos los niveles.
“La desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Isidro Burgos de Ayotzinapa la noche del 26 al 27 de septiembre de 2014 constituyó un crimen de Estado en el que concurrieron integrantes del grupo delictivo Guerreros Unidos y agentes de diversas instituciones del Estado mexicano“, declaró Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos del Gobierno, en una conferencia de prensa.
egún la polémica versión del Gobierno de Enrique Peña Nieto (2012-2018), la llamada “verdad histórica”, policías corruptos detuvieron a los estudiantes y los entregaron al cártel Guerreros Unidos, que los asesinó e incineró en el basurero de Cocula y tiró los restos en el río San Juan.
La Administración de López Obrador ha desmentido esa “verdad”, al coincidir con familiares y con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y su Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), que señaló que los cuerpos no pudieron ser quemados en ese lugar. (Fuente: Vanguardia)