CIUDAD DE MÉXICO, MX.- En una serie de emails, el grupo de hackers Guacamaya, señalaron que la revisión de los correos electrónicos de la Secretaría de la Defensa Nacional indicaba hasta ahora que gran parte de la información ya era pública, según El Financiero.
El grupo, incluso, duda que existan correos “explosivos”, posiblemente porque las comunicaciones más delicadas cuentan con mejor protección.
Sin embargo, los hackers advirtieron que existe evidencia de que las Fuerzas Armadas están siguiendo muy de cerca los movimientos políticos y sociales.
Indicaron que estarían dando seguimiento a los grupos opuestos a la construcción del Tren Maya en la península de Yucatán, a los familiares de los 43 normalistas de Ayotzinapa y al movimiento zapatista en Chiapas.
En lugar de intentar obtener beneficios monetarios o exigir un rescate por penetrar los sistemas informáticos gubernamentales por medio de un ciberataque, Guacamaya parece ser más una operación “hacktivista” con la que se pretende filtrar documentos con fines de justicia social.
El periodista Carlos Loret de Mola dijo que, entre los correos electrónicos robados, había registros médicos sobre el presidente, incluyendo un vuelo de emergencia a la capital del país desde su rancho en enero, en un momento en que padecía una fuerte angina de pecho y corría el riesgo de sufrir un infarto. Previamente se desconocía que se había efectuado ese vuelo.
Posteriormente ese mes se sometió a un cateterismo cardiaco, que sí se dio a conocer, pero en ese momento se dijo que se trataba de un examen de rutina. López Obrador sufrió un ataque al corazón en 2013 y padece hipertensión.
Hackers Guacamaya
Integrado por elementos anónimos, los hackers dicen ser guerreros por la justicia social y utilizar el hackeo para sacar a la luz la injusticia y la corrupción en defensa de los pueblos indígenas.
Anteriormente, piratas cibernéticos que utilizan ese mismo nombre robaron y dieron a conocer los correos electrónicos de una compañía minera que desde hace tiempo enfrentaba acusaciones de violaciones a los derechos humanos y daños al medio ambiente en Guatemala.
En un comunicado que acompaña su acción más reciente, el grupo se quejó del saqueo de Latinoamérica (a la que llama Abya Yala) por parte de los colonizadores, y de los persistentes objetivos extractivistas del “norte global”.
El grupo emitió una declaración de mil 400 palabras en la que dice que las fuerzas armadas y las policías de los países latinoamericanos son utilizadas por los gobiernos “para mantener presos a sus habitantes”. (Fuente: El Financiero)