CIUDAD DE MUERTO, MX.- La ex líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo Morales ganó un nuevo juicio en contra del Servicio de Administración Tributaria (SAT), publicó La Jornada.
Con nueve votos a favor y uno en contra, la Sala Superior del Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA) anuló la resolución impugnada que la obliga al pago de impuestos sobre la renta, recargos y multas correspondiente al ejercicio fiscal 2011.
Aunque no se dio a conocer el monto de la deuda, la sentencia de los magistrados permite al SAT reponer el procedimiento de fiscalización en contra de Gordillo Morales en un plazo de cuatro meses.
La sala declaró fundados los argumentos de la ex lideresa del magisterio quien en su momento señaló que la autoridad fiscalizadora violentó su garantía de audiencia y su derecho humano de acceso a la justicia, ya que no obtuvo la posibilidad de ejercer de manera efectiva su garantía de audiencia debido a que se encontraba privada de la libertad durante el periodo en el que tenía que comprobar sus impuestos.
En su ponencia, el magistrado Carlos Mena Adame, señaló que los argumentos de Elba Esther Gordillo para desvirtuar las acusaciones fueron infundados, a excepción donde se controvierte la violación a su garantía de audiencia, porque la autoridad no respetó el derecho de audiencia de la demandante atendiendo al hecho de que se encontraba privada de su libertad durante la revisión de gabinete que le fue practicada, por lo que no le fue posible ejercer debidamente su defensa.
“Por tanto se declara la nulidad de la resolución impugnada para en el caso de que la autoridad fiscalizadora, si así lo decida, por facultades discrecionales reponga el procedimiento de fiscalización otorgando nuevamente a la actora el plazo legal para desvirtuar los hechos y omisiones que le fueron dados al conocer en el oficio de observaciones sujetándose al plazo de cuatro meses con los que cuenta para cumplir dicho fallo”, tiempo en el cual Gordillo Morales el plazo tiene la oportunidad nuevamente para desvirtuar los hechos y omisiones. (Fuente: La Jornada)