Por Itzel Chan
MÉRIDA, MX.- Julissa, la madre de familia a la que le fueron arrebatados sus hijos, presuntamente por prejuicios del personal médico del Hospital General Agustín O’Horán por sus preferencias sexuales, hoy se reunió con la secretaria de Gobierno de Yucatán, María Fritz Sierra y como parte del proceso, le piden que tome terapia psicológica, que compruebe que tiene un trabajo con ingreso fijo y una casa propia para así quizá darle la posibilidad de verlos.
La mujer que ha hecho su caso público acampó durante dos días frente al Palacio de Gobierno de Yucatán, esto para llamar la atención del mismo gobernador Mauricio Vila Dosal y así tomara en cuenta su caso.
Este martes, vecinas y vecinos acudieron a la zona de protesta para manifestar su apoyo y también exigir que su caso sea escuchado.
De esta manera, hoy la madre de familia fue atendida por Friz Sierra y al salir, compartió que le entregaron una serie de documentos en los que le señalan que tiene que cumplir con una serie de requisitos para que pueda ver a su hija recién nacida y a su hijo de seis años que ahora se encuentran bajo el resguardo de la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes del Estado de Yucatán (Prodennay).
“Yo no quiero sólo verlos, quiero que me los devuelvan”, indicó Julissa esta tarde.
Parte de los requisitos que le piden para que pueda continuar el proceso de la custodia de sus hijos es que entregue una constancia laboral en donde se indique que tiene un trabajo y un ingreso fijo, porque ella se dedica a la albañilería, además de llevar sesiones de terapia psicológica.
Julissa no cuenta con una casa propia, sin embargo, le pidieron que compruebe la posesión de un terreno y esta es la parte que más le preocupa, pero mencionó que hará lo que pueda para poder tener a sus hijos consigo para las siguientes fechas.
Al salir de la reunión en el Palacio de Gobierno, Julissa pidió el apoyo de la ciudadanía para que su caso siga siendo de ojo público, pues no quiere luchar sola en esta situación. (Noticaribe).