CUBA.- Francisco Javier Alfonso Vidal, líder de los masones cubanos, decidió no regresar a la Isla tras un viaje a México junto a su esposa, informó la Gran Logia de Cuba en un comunicado hecho público el lunes y compartido con los miembros de la fraternidad, publicó diariodecuba.com.
Según el documento, al que Diario de Cuba tuvo acceso, el Gran Maestro Alfonso Vidal estaba como invitado por la Gran Logia de Veracruz, pero no regresó a la Isla como estaba previsto el pasado 21 de diciembre.
“Desde ese momento, los intentos por comunicarse con el hermano han sido infructuosos, lo que denota una renuncia tácita a su cargo”, afirma la Gran Logia, que admite que desconoce el destino de su dirigente.
No obstante, este martes Alfonso Vidal hizo pública una carta de renuncia a su cargo alegando que no existe “la posibilidad de cumplir con la total transparencia, autonomía y libertad necesaria lo que define la Legislación Masónica Cubana para llevar a cabo esta responsabilidad”.
En la misiva, Alfonso Vidal acusa a la Gran Logia de “tergiversar la Ley” masónica y recuerda que antes de salir de viaje delegó sus funciones en el gran maestro de ceremonias Armando Guerra Lozano, por lo que rechaza el alegado abandono de su cargo.
“Tengo el conocimiento de que se estaba orquestando mi destitución del cargo a través de una Sesión Extraordinaria”, agrega, y afirma que quienes lo acusan “están cumpliendo expresamente con las instrucciones dadas por la Seguridad del Estado a cuantos funcionarios se prestasen, para que no pudiese llegar una renuncia formal al cargo para el que fui electo y acepté debidamente y para el que estoy totalmente en facultades de renunciar sin que deba haber más circunstancia o elemento que la imposibilidad de poder cumplirlo por el gangsterismo político que funciona en la Gran Logia de Cuba”.
“Los masones cubanos tienen derecho a saber que nuestra institución se encuentra bajo uno de los mayores ataques que ha recibido en los últimos años desde el 1 de enero de 1959. Varios hechos han precipitado en los últimos tiempos este suceso, como las muestras más claras de la inestabilidad no solo económica y social sino política, como mayor muestra las protestas del 11 y 12 de julio del 2021 en toda Cuba”.
“Es sabido que nuestro ilustre hermano José Ramón Viñas Alonso, Muy Poderoso Soberano Gran Comendador del Supremo Consejo del Grado 33 para la República de Cuba, emitió una carta dirigida al presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, dando su criterio sobre el llamado al enfrentamiento entre cubanos que hizo este cuando todo estaba peor, lo que hizo que la Seguridad del Estado lo citara con el ánimo de que se retractara y, ante su negativa, hasta el presente eso ha tenido muchas implicaciones, una de ellas la que me lleva a hacer este documento”, subraya.
Alfonso Vidal señala que Viñas Alonso se convirtió “en una molestia para el Gobierno” cubano, y el apoyo que recibiera por su conducta “puso a la Seguridad del Estado en la misión de cómo lo sacaban del medio, y evidentemente conocen nuestras leyes, por lo que se propusieron que yo como figura máxima del Simbolismo al que él pertenece, por ser Maestro Masón de una de nuestras logias, fuese acusado y suspendido de derechos”.
“Queridos hermanos, este masón que les escribe recibió más de 70 llamadas en un mes hechas por un individuo que se hace nombrar Poll, no puedo precisar la cifra exacta porque se borró el historial, pero del 15 de octubre al 12 de noviembre fueron 19 y yo estuve casi un mes fuera de Cuba en esa fecha”.
“Este personaje me interceptó varias veces en la calle, razón por la que tomé la medida de andar con mi esposa, y en varias oportunidades me citaron para la calle E No.456 entre 19 y 21, en el Vedado. Según este oficial de la Seguridad del Estado, lleva trabajando la masonería hace 40 años y asegura que hay masones que trabajan para ellos, lo cual es una vergüenza”, denuncia.
En su carta, Alfonso Vidal relata varios planes del aparato represivo para tomar control desde dentro de la masonería cubana, y subraya: “Queda en las manos de los masones cubanos auténticos no permitir que nada de eso suceda y que una vez sabida la influencia cada vez más creciente que busca ejercer la Seguridad del Estado en nuestra institución, no se permita que alguien probablemente ligado a estos órganos llegue al puesto”.
“De ahora en adelante se puede tener fe de que no somos del agrado de los que mandan en ese país”, finaliza su misiva.
Alfonso Vidal precisa también que él y su esposa han pedido asilo político en EEUU.
Hace justo un mes, Estados Unidos incluyó a Cuba en su lista negra de países que violan sistemáticamente la libertad religiosa, a lo cual el Gobierno reaccionó victimizándose.
“Rechazamos la inclusión de Cuba en esa arbitraria lista en que el Gobierno de EEUU nos incluyó. Las instituciones religiosas gozan del derecho a practicar sus creencias religiosas con apego a la Ley y el respeto entre todas”, aseguró en respuesta la jefa de la Oficina Atención a los Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista, Caridad Diego.
“Creyentes y no creyentes participamos en el desarrollo de nuestra sociedad como parte del pueblo al que pertenecemos”, sostuvo la funcionaria, que aseguró que el sector religioso organiza muchas actividades en Cuba, pese a que los grupos que se salen del control del PCC son penalizados y hostigados. (Fuente: diariodecuba.com)