PLAYA DEL CARMEN, MX.- Familiares de Agostina Jalabert, modelo argentina hallada sin vida en esta ciudad en febrero de este año, han interpuesto una denuncia penal en contra de Óscar Montes de Oca, fiscal general del Estado de Quintana Roo, así como de otros cuatro funcionarios, por omisiones en este caso.
De acuerdo a familiares, desde el primer momento, el fiscal que intervino en el caso, Irlanda Ramírez Flores, buscó revictimizar a la fallecida, sin aplicar los protocolos por posible feminicidio, dejando ir a la única persona que estaba en el departamento con la víctima.
Aunado a ello, la Fiscalía ignoró datos en la autopsia que apuntaban a tortura y abuso sexual, para después ordenar la cremación del cuerpo, sin autorización de la familia.
El periódico español El País da cuenta hoy de la denuncia interpuesta por la familia de la víctima, en donde indican que en ella se acusa a Montes de Oca, al mencionado Irlanda Ramírez Flores, al igual que a José Carlos Villarreal Rosillo, vicefiscal de asuntos internos, y Jacobo Gotu Ramírez, policía ministerial que llevó el caso.
De acuerdo a esta publicación, la hermana de la víctima, Candela Jalabert, regresó al departamento donde ambas vivían la noche del 18 de febrero. El guardia de seguridad le advirtió que la noche anterior vecinos se quejaron por disturbios cometidos por Agostina y su pareja sentimental, Juan Manuel Reverter. Al entrar al departamento, la hermana encontró que la puerta estaba trabada desde adentro, por lo que tuvo que golpear la puerta por 15 minutos hasta que la abrió Juan.
Fue entonces cuando halló a Agostina colgada por el cuello de un toallero a un metro del piso, vestida para salir y con tacones.
Las irregularidades comenzaron de inmediato, acusa la familia. Irlanda Ramírez Flores interrogó a la pareja de la occisa, pero solo para preguntarle de la supuesta depresión de la víctima y de cuántas pastillas tomaba, sin preguntarle por qué tardó 15 minutos en abrir la puerta, cuál era el motivo de la riña que habían sostenido la noche anterior o cualquier otra inconsistencia hallada, como el que declarara que estaba durmiendo, pero atendió la puerta totalmente vestido y con la cama hecha.
Los agentes no activaron ningún protocolo para tratar el asunto como feminicidio y el posible homicida fue dejado en libertad. No requisaron los celulares.
El agente Jacobo Gutu Ramírez ingresó al expediente una supuesta declaración de la hermana de la fallecida que ella desconoce como falsa, pues a ella le preguntaron de forma reiterada si Agostina sufría de depresión, revictimizándola, a lo que ella contestó de forma terminante que no.
La necropsia realizada por la autoridad determinó igualmente que se trató de un suicidio, pero un análisis forense sobre esta necropsia señala que la víctima había sido golpeada, tenía quemaduras de cigarrillos, y tenía indicios de haber sido violada.
Una segunda autopsia, realizada por la propia familia, fue imposible, toda vez que los restos fueron cremados por determinación de Irlanda Ramírez.
En la publicación de El País, Germán Jalabert, tío de Agostina, señala que ya sostuvieron una reunión con la Fiscalía, a la que no acudió Óscar Montes de Oca, en la que les aseguraron que realizarían todas las gestiones para llegar a buen puerto.
“Lógicamente vinimos con una sensación distinta de la que teníamos antes, desde que se hizo cargo la fiscal de feminicidio, la causa tuvo un nuevo impulso”, señala. (Agencia SIM)