Por Itzel Chan

MÉRIDA, MX.- Debido a la amenaza que sufrió el tapir de manera directa con la caza furtiva y la pérdida de hábitats, se extinguió hace más de 50 años en el estado, por lo que ahora se presentó un proyecto de investigación con el cual se busca su rescate y recuperación de población en la entidad.

Epigmeo Cruz Aldán, jefe de proyectos ambientales de Grupo Libera, explicó que este año comenzará el proceso de recuperación de la especie, por lo que se espera la llegada de al menos ocho ejemplare a la Unidad de Manejo Ambiental, ubicada entre Kinchil y Celestún, en donde se establecerá un Santuario del Tapir.

La intención del proyecto es que primero la especie se reproduzca y posteriormente, bajo monitoreo se podría reinsertar a la vida silvestre.

Para Cruz Aldán no es una tarea tan fácil y sencilla, pues considera que se requiere de mucho cuidado y sobre todo de monitoreo, por ende, dinero, ya que se estima que se implementen cerca de 30 millones de pesos.

A la par, durante las acciones para que se recupere la especie, se hará investigación y trabajo de educación, para que las personas sean conscientes del cuidado de esta especie y de otras que igualmente están en riesgo de desaparecer.

Los tapires que llegarán a la entidad, vendrán de Guatemala, ya que en otras partes de México, su población está controlada ante el mismo riesgo que enfrentan.

“Tampoco quisimos capturarlos en vida silvestre porque no pensamos en extraerlos”, mencionó.

Reconoció que se requerirá de mucho trabajo coordinado con las autoridades locales y federales porque cuando las crías nazcan habrá que buscar los sitios idóneos en los cuales deben estar, lo mismos al ser liberados en un futuro.

Se prevé que los primeros resultados de este proyecto comiencen a notarse dentro de cinco años y a la par a las crías se les colocará un radiocollar satelital que permitirá el monitoreo de los ejemplares y conocer su evolución y desenvolvimiento en el hábitat. (Noticaribe)

Comentarios en Facebook