Por Itzel Chan

MÉRIDA, MX.- El pasado 17 de agosto se registró un violento enfrentamiento entre elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y los habitantes de Ixil que defendían su territorio de despojo y a casi un mes de este hecho, aún denuncian que se sienten amedrentados por parte de esta corporación y de la Fiscalía General del Estado (FGE) porque hay vigilancia permanente en la zona.

Asunción Chi es uno de los habitantes de esta comunidad maya y califica lo sucedido como violación a sus derechos humanos porque aquel día hubo cierre de caminos y accesos para los pobladores con total impunidad.

“Ellos llegaron y no nos mostraron documentación que les permitiera hacer eso, entonces nos manifestamos porque íbamos a defender nuestro territorio”, mencionó.

Igualmente, acusó que han sentido un abandono e indiferencia total de parte de las autoridades municipales y estatales.

No obstante, tras el suceso, todavía hay un cerco en 308 hectáreas con el fin de que las y los campesinos no puedan ocupar del todo sus tierras y producir en ellas.

“Nuestros terrenos tienen alambres y tenemos que pasarlos junto con todo lo que tenemos que llevar para regar y trabajar la tierra”, mencionó.

A la par, expusieron que aún permanecen rondines por parte de la SSP, de la FGE y también de personas que no identifican en el pueblo, pero que visten de civil y están ahí para vigilarlos.

“El pueblo se siente amenazado, la SSP no dice nada, la presidencia municipal tampoco y hay personas que por temor están sacando sus producciones y están mal vendiendo su cosecha”, aseguró.

Al respecto, Alejandra Cantún, también habitante del lugar, compartió que se sienten cansados porque consideran que la inseguridad ya llegó al pueblo.

“Nuestros terrenos tienen alambres y nos sentimos inseguros porque llegan camionetas, vehículos sin placas y la presidencia municipal no dice nada, además ponen a gente del pueblo en nuestra contra”, mencionó.

El viernes pasado tuvieron una visita de la Secretaría de Gobernación Federal y de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), por lo que les informaron que tomarán su caso.

Sergio Oceransky, de la Fundación Yansa, recordó que en este tipo de sucesos de opresión igual tiene injerencia el Gobierno del Estado de Yucatán, porque actúa en contubernio con grupos de poder y empresas que despojan territorio.

Debido a esta situación, las y los habitantes planean dos manifestaciones, una en Ixil el próximo 16 de septiembre y la otra el 30 de septiembre en Mérida, que iniciará en el Remate de Paseo de Montejo a las 4:00 de la tarde. (Noticaribe)

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